
El dinero siempre busca los activos que ofrecen las rentabilidades más altas. Esta máxima de los mercados está pesando este año a la divisa japonesa, el yen, que ha caído casi un 19% en el año y ayer tocó nuevos mínimos no vistos desde 1998 frente al dólar estadounidense. El cruce cayó más de un 1,6% durante la jornada, retrocediendo hasta los 0,0069 dólares por yuan.
Es la divergencia entre la política monetaria de la Reserva Federal estadounidense (Fed) y la del Banco de Japón (BOJ), la que está castigando a la divisa nipona. Mientras en Estados Unidos la Fed ya lleva meses subiendo los tipos de interés, incrementándolos en más de 225 puntos básicos desde el pasado marzo, el Banco de Japón se resiste a mover ficha, posponiendo la que será la primera subida de tipos en el país desde el año 2007.
La política del Banco de Japón sigue siendo acomodaticia, a diferencia de la que han adoptado la mayor parte de bancos centrales del planeta. La realidad es que la situación macro es muy diferente en el país asiático, frente a otros, como Estados Unidos, donde las tasas de inflación son muy superiores. En el encuentro de banqueros centrales de Jackson Hole, a finales del pasado mes de agosto, Haruhiko Kuroda, gobernador del banco central, reconoció que no tiene "más remedio" que seguir manteniendo una política monetaria acomodaticia.
"Es milagroso, pero ahora tenemos una inflación del 2,4%", explicó Kuroda, "y casi todo este repunte lo ha causado el aumento de los precios de las materias primas, la energía y la comida en los mercados internacionales", reconoció. "El año que viene caerá hasta el 1,5%" insistió, por lo que "no tenemos más remedio que mantener el rumbo de nuestra política, hasta que veamos un aumento de los salarios y de los precios que sea sostenido", señaló.
Con un bono japonés ofreciendo un 0,23% anual a 10 años, y el estadounidense un 3,3%, el dinero está yendo a este último, y esta es la principal causa de las caídas que está experimentando la divisa nipona, que se devalúa este año en todos sus 10 cruces más negociados.