
La compra de Trea AM por parte de Beka Finance, pendiente de aprobación por los reguladores, ha consolidado al grupo dirigido por Carlos Stilianopoulos como una de las firmas independientes más relevantes del mercado español, tanto por el lado de la gestión de activos como por el de la desintermediación financiera, con una estimación de 32.000 millones de euros bajo gestión al cierre de este año. Pero la intención de la firma es consolidar este crecimiento hasta alcanzar los 50.000 millones en los próximos dos años, apoyándose sobre todo en el área de gestión de activos -donde engloban los fondos líquidos, los de gestión alternativa y las titulizaciones-, la plataforma de crédito privado, donde ya cuentan con un primer fondo de deuda para pymes, y de real estate.
Con la adquisición de Trea, se sitúan en una posición relevante para competir en fondos de inversión, planes de pensiones y mandatos de gestión, al sumar 6.000 millones de euros, pero Stilianopoulos no descarta llegar a los 10.000 millones, ampliar la gama de productos en renta variable y mixtos y realizar contrataciones en el equipo de gestión, según señaló ayer en un encuentro con periodistas.
"Queremos ofrecer lo que cualquier banco pero sin comercializar depósitos ni conceder préstamos. Queremos ser líderes en banca independiente ofreciendo una gama completa de servicios a los clientes", apuntó el consejero delegado, quien subrayó la intención de Beka de situarse un escalafón por debajo de los mayores firmas. "En España hay un hueco entre las grandes entidades tradicionales y las boutiques financieras de tamaño medio y nosotros queremos liderar ese segmento", aseguró.
Respecto a la banca privada, Stilianopoulos señaló que este segmento de negocio se encuentra en un "momento complicado" y de "incertidumbre", razón por la que descartan entrar en operaciones corporativas en este sector. "No somos partidarios de realizar compras porque porque quizá lo que compras no es lo mismo que te llega al final", advirtió Stilianopoulos, para quien las bajas comisiones han provocado que sea un negocio poco rentable. Eso sí, el CEO de Beka no descarta apuntalar esta área del grupo mediante la integración de empresas de asesoramiento financieras relevantes, y focalizados en un prototipo de cliente dueño de una empresa familiar al que las entidades de banca privada no suelen atender personalizadamente por tamaño patrimonial, alrededor de 50 millones de euros.
Sobre la posibilidad de continuar realizando adquisiciones en el resto de áreas del grupo, Stilianopoulos señaló que "ahora mismo nos encontramos donde queremos estar y vamos a consolidarnos con más contrataciones hasta llegar a los 350 empleados en 2024, pero eso no significa que no podamos hacer más compras". La firma también tiene un segmento centrado en fusiones y adquisiciones, denominado M&A Acron Beka, y uno de fintech y neobanca, donde cuentan con Rebellion Pay, con nmás de 300.000 clientes, y Hey Trade, para realizar transacciones con fondos y ETFs.