En la publicación trimestral del conocido como su Libro Beige, Goldman Sachs recopila las tendencias fundamentales y temáticas de las transcripciones de los resultados de las empresas del S&P 500. Durante la temporada a punto de acabar, tres temas han dominado las expectativas de beneficios. Por un lado, la presión y la preservación de los márgenes. Por otro, tanto las iniciativas ESG como las posiciones de efectivo.
En lo que se refiere a los márgenes, estos alcanzaron en el segundo trimestre un máximo histórico del 12,1%, a pesar de las presiones de los costes de los insumos. La mayoría de las empresas protegen sus márgenes en este entorno inflacionista trasladando los aumentos de precios a los consumidores, mientras que unas pocas se centran en la gestión de los costes.
Sobre las iniciativas ESG, incluso antes de que la ONU publicara esta semana su histórico informe sobre el cambio climático, los debates sobre este asunto en las presentaciones de resultados se centraron en la apremiante cuestión de la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Los proveedores de datos ESG observaron una mayor demanda de productos de análisis de escenarios climáticos y de datos que cuantifican el riesgo físico del cambio climático. Al mismo tiempo, las empresas comentaron explícitamente sus planes para reducir o eliminar la huella de carbono de sus operaciones. La mayoría de los planes implican una fecha límite para alcanzar las emisiones netas cero, normalmente en 2050.
Por último, los saldos de efectivo de las compañías del S&P 500 se sitúan en niveles elevados gracias a la mejora de los beneficios así como a la emisión de deuda y acciones. Los ratios de efectivo con respecto a los activos, tanto agregados como medios, se sitúan cerca de máximos históricos, lo que permite a los directivos disponer de flexibilidad en el uso de su caja.
Las empresas están explorando formas de invertir para crecer (a través de expansión de capital, inversión en I+D y fusiones y adquisiciones), así como retribuyendo a sus accionistas (mediante la entrega de dividendos y recompras). Un pequeño subgrupo está aprovechando la oportunidad para reducir el apalancamiento.
Hasta la fecha, los resultados del segundo trimestre de 2021 del S&P 500 han superado las estimaciones del consenso en todos los frentes; los analistas esperaban un crecimiento del beneficio por acción (BPA) del 61% anual frente al 86% registrado.
Hasta el pasado 11 de agosto, 457 empresas habían presentado sus resultados del segundo trimestre, lo que representa el 90% de la capitalización bursátil del S&P 500. De las empresas que ya han presentado sus resultados, el 71% ha superado las estimaciones. Desde Goldman esperan un crecimiento del BPA del 45% y del 2% en 2021 y 2022, respectivamente, gracias a unas perspectivas de ingresos y márgenes más sólidas.