Advierte de que la empresa ya construye una planta en los terrenos de Xove propuestos y niega conocer el solar de Ribadeo
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 4 (EUROPA PRESS)
El presidente de Pescanova, Manuel Fernández de Sousa, discrepó hoy nuevamente de los criterios esgrimidos por el Gobierno gallego para rechazar la construcción de una planta de engorde de rodaballo en Cabo Touriñán, pero señaló que estudiará las alternativas planteadas por el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño.
Fernández de Sousa puntualizó que los terrenos en Xove a los que se refirió Touriño "ya son propiedad de Pescanova" y en ellos la empresa construye "la mayor planta de rodaballo del mundo", que prevén que esté operativa a finales de este año y en la que se invertirán 35 millones de euros.
Respecto al otro emplazamiento en Ribadeo, Fernández de Sousa negó conocer a qué terrenos se refiere la Xunta. "Cuando sepamos cuáles son, podremos opinar", aseveró en declaraciones a Europa Press. En cualquier caso, afirmó que la empresa "recoge positivamente la predisposición de Touriño a intervenir para buscar una ubicación alternativa" a la planta de rodaballo.
DISCREPANCIAS.
Aún así, reiteró su "discrepancia" de los criterios que expuso el presidente gallego para rechazar la construcción de la planta acuícola en Touriñán. Mientras que Touriño advirtió de que "estropear" este enclave natural sería "despilfarrar dinero y empleo", para el presidente de Pescanova este rechazo constituye "un posicionamiento político".
"Entendemos que no se ha estudiado adecuadamente", afirmó. En todo caso, alejó la posibilidad de que Pescanova se lleve este proyecto acuícola a otro sitio porque "es una empresa gallega con voluntad de invertir en esta tierra".
Por último, Fernández de Sousa expresó su "agrado" también por que Touriño haya apostado por la acuicultura, aunque puntualizó que ahora es necesario "esperar a hechos y no sólo a declaraciones".