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La economía española se acelera, pero algunos desequilibrios persisten

Por Julien Toyer y Sarah White

MADRID (Reuters) - La economía española creció en el primer trimestre a su tasa más alta en más de siete años en la senda para cumplir con la nueva previsión de alcanzar en el año un alza del PIB del 2,9 por ciento, aunque otros datos mostraron que persisten algunos desequilibrios.

La mejora de la economía nacional es la principal baza del presidente del Gobierno Mariano Rajoy para volver a ganar las elecciones a finales de año y encarar una segunda legislatura en un momento en el que los sondeos muestran la amenaza de nuevas formaciones políticas con amplio respaldo social.

El consejo de ministros se reúne esta misma tarde para cerrar el nuevo cuadro macroeconómico que, según avanzó Rajoy, eleva la previsión de crecimiento para el año al 2,9 por ciento desde la proyección anterior del dos por ciento.

Los datos preliminares anunciados el jueves por el INE mostraron que el objetivo es realista al superar las previsiones con un crecimiento intertrimestral del 0,9 por ciento y de un 2,6 por ciento interanual impulsado por el repunte del consumo.

"La recuperación se está moviendo en un plano superior, apoyada en un entorno externo favorable, con los precios del crudo bajos y la reciente caída en el euro, lo que ayudará a acelerar el impulso de la recuperación a lo largo de 2015", dijo Raj Badiani, economista de IHS Global Insight.

Badiani dijo que a falta de conocer el desglose, el consumo y las inversiones industriales deberían ser los motores de crecimiento en el primer trimestre junto con el tirón de las exportaciones gracias a la debilidad del euro y el aumento de la demanda en toda la zona euro.

La caída de la inflación - el IPC cayó un 0,6 por ciento en abril - también ha ayudado a apuntalar la recuperación al aumentar el presupuesto de las familias, explicaron analistas.

Aunque España parece haber dejado definitivamente atrás dos recesiones y una crisis bancaria y ahora muestra una de las tasas de crecimiento más aceleradas de la eurozona, la elevada tasa de paro todavía desluce el cambio de tendencia.

El elevado déficit público y una deuda externa bruta de alrededor del 170 por ciento del PIB, una de los más altos del mundo, son otras de las amenazas a la recuperación.

Según datos publicados también el jueves por el Banco de España, el déficit por cuenta corriente en febrero se situó en 2.000 millones de euros, similar al de un año antes.

Entre las nubes que también sombrean el horizonte figura la proyección de un parlamento muy fragmentado en la próxima cita electoral que podría poner freno a las reformas recientes, aumentar los costes de la deuda y pesar negativamente en la confianza de consumidores y empresas.

Las encuestas recientes muestran prácticamente un empate a cuatro entre el gobernante Partido Popular, el Partido Socialista y las nuevas formaciones de Ciudadanos y Podemos, al auge por las consecuencias de la crisis y el descrédito político.

"Con la economía doblando la esquina, el próximo reto es asegurarse de que la recuperación es más inclusiva, particularmente con unas elecciones generales tan insólitas como las previstas para finales de 2015", dijo Badiani.

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