PRISTINA, Serbia (Reuters) - Kosovo miraba el lunes hacia el reconocimiento de las potencias occidentales que fueron a la guerra para salvar a su mayoría albanesa, pero Rusia avisó de que el nuevo estado nunca se impondrá sobre sus aliados serbios en el territorio.
Los fuegos artificiales pusieron fin a un día de celebración en Pristina, la capital de Kosovo, donde el Parlamentoadoptó una declaración de independencia de Serbia y proclamó la nueva República de Kosovo como un estadosoberano.
Los dos millones de albaneses de Kosovo se quedaron indagando qué país sería el primero en reconocer al sextoestado que se escinde de la ex Yugoslavia, dominada por los serbios, cerrando un largo capítulo en su sangrientadesaparición.
Los ministros de Exteriores de la Unión Europea se reúnen el lunes para discutir la secesión de Kosovo. Se esperaque Reino Unido, Alemania, Francia e Italia, al igual que Estados Unidos, reconozcan rápidamente el nuevo país.
En una sesión de emergencia en el Consejo de Seguridad de la ONU, las potencias occidentales resistieron el intentoruso por bloquear la independencia de Kosovo, y dijo que la OTAN y la UE se responsabilizarían de la estabilidad de laregión.
Proponiendo la declaración de independencia al Parlamento, el primer ministro Hashim Thaci dijo que Kosovo sería unpaís de "todos sus ciudadanos", en un gesto a los 120.000 serbios que aún viven allí.
Pero Serbia y Rusia dejaron a un lado ese punto.
"Advertimos encarecidamente contra cualquier intento de adoptar medidas represivas si los serbios en Kosovo decidenno acceder a esta proclamación unilateral de independencia", dijo en Nueva York el embajador ruso ante la ONU, VitalyChurkin.
Los serbios de Kosovo, liderados por el norte dominado por los serbios y con el total respaldo de Belgrado, rechazanla secesión del territorio, reforzando una división étnica que la OTAN y las Naciones Unidas no han logrado borrar desdela guerra de 1998-99.
A mediodía del lunes se han convocado protestas en las ciudades serbias de Kosovo. Un coche de la ONU fueincendiado durante la noche en la ciudad serbia de Zubin Potok, dijeron testigos, después de lanzar granadas de mano aedificios de la ONU en el bastión serbio de Mitrovica horas después de la declaración.
La mayoría de los 27 estados miembros de la UE reconocerán Kosovo y suscribirán una misión de 2.000 soldadospara mantener la paz y asumir la supervisión del nuevo estado, en manos de las Naciones Unidas. Pero al menos seisestados de la UE, entre ellos España, son reacios.
"Los acontecimientos de hoy (...) representan la conclusión de un proceso de estatus que ha agotado todas las vías enbusca de una solución negociada", dijeron siete estados occidentales en el Consejo de Seguridad en un comunicado.
/Por Matt Robinson/