
Evy Hambro, gestor de los fondos MLIIF World Mining Fund y el MLIIF World Gold Fund de la firma BlackRock Merrill Lynch Investment Managers, expone algunos de los argumentos por los que el oro debe volver a subir: caída en la producción, reconstrucción de inventarios, fortaleza inversora de los ETFs...
"El oro ha sido uno de los pilares de las economías y los sistemas bancarios del mundo desde siempre e incluso hoy en día conserva gran parte de su atractivo. Sin embargo, pocos inversores habrán pasado por alto la gran volatilidad de su precio en los últimos meses", comenta en un informe sobre el mercado del oro y las compañías mineras este gestor.
El futuro de referencia sobre la onza de oro ha vivido un año de fortísimas oscilaciones. Llegó a un máximo aproximado de 720 dólares/onza en mayo y actualmente cotiza en el entorno de los 580 dólares/onza. "No obstante, pese a la caída de los mercados y a las grandes fluctuaciones del precio en dólares, seguimos siendo optimistas respecto al precio del oro", explica. ¿Por qué motivos? Hambro enumera y desarrolla en un informe algunos de ellos.
Oferta estable... caída de la producción
Este experto recuerda que a finales de la década de 1990, el precio del oro estaba en unos 250 dólares/onza debido a la escasa demanda y a la razonable abundancia de la oferta. "Por este motivo, muchas compañías dejaron de explorar en busca de nuevos yacimientos y de invertir en los que ya tenían, pues el precio no justificaba este nivel de inversión", apunta y continúa: "en el año 2004 se produjo la mayor caída anual de la producción de la industria minera del oro en más de 60 años, con una producción minera de 1.216 toneladas en el primer semestre y de 1.286 toneladas en el segundo".
"De cara al futuro, no vemos incrementos significativos de la producción; en todo caso, consideramos que seguirá disminuyendo en los próximos años. Además de la caída de la producción, las compañías mineras han fracasado en su búsqueda de nuevas fuentes de suministro", añade el gestor de Blackrock MLIM.
2006, EL AÑO DEL ORO
(Precio medio del contrato con entrega en un mes del oro en los últimos siete años. Unidad, en dólares/onza y cambio en porcentaje respecto al ejercicio anterior. Fuente: Bloomberg)
AÑO | PRECIO MEDIO ($) | VARIACIÓN (%) |
2006 | 600 | 34,8 |
2005 | 445 | 8,8 |
2004 | 409 | 12,7 |
2003 | 363 | 17 |
2002 | 310 | 14,4 |
2001 | 271 | 2,6 |
2000 | 264 | -5,3 |
"Entre 1995 y 1998, los descubrimientos anuales de oro de las compañías mineras equivalían a la producción anual, mientras que entre 1999 y 2004 los descubrimientos anuales sólo representaron en torno al 12-14% de la producción anual. Esto ha derivado en una enorme insuficiencia de las carteras de desarrollo de las compañías. Aunque existen algunos proyectos nuevos, para que las compañías empiecen a invertir en nueva capacidad será necesario un precio más alto del oro", dice.
Otro de los argumentos alcistas, en opinión del gestor, es la limitación de la oferta gracias al Acuerdo del Oro de los Bancos Centrales, que "hace poco probable que la oferta de oro aumente de forma significativa en un futuro próximo, lo que debería representar un soporte para un precio más alto de este mineral".
"Los fundamentales de la demanda también deben apoyar un precio más alto del oro. Desde el inicio de la década, la demanda ha aumentado enormemente impulsada por países como China e India (siendo este último el mayor consumidor de oro en términos anuales). Mientras estos países cobran velocidad, el éxito de las campañas de promoción ha contribuido a incrementar la demanda de oro para joyería, mientras que la industrial y minorista también se mantiene fuerte.
La fuerza de los ETFs o fondos cotizados
La introducción de Fondos Cotizados (ETFs) que tienen como subyacente en el oro ha generado un impulso aún mayor en las cifras de demanda de oro como inversión. "Lanzados con éxito en 2004, estos fondos básicamente han permitido que el Consejo Mundial del Oro, conjuntamente con otras autoridades, monetice el oro para su cotización como renta variable en varias bolsas de todo el mundo", explica. Los ETFs engloban más de 15 millones de onzas de oro, según el informe de Blackrock MLIM.
"Sin embargo, vale la pena señalar que, durante el periodo de debilidad del precio del oro, el volumen físico contenido en los ETFs ha seguido aumentando. No hemos observado ninguna retirada significativa de oro de estos productos, como pronosticaban algunos bajistas", arguye el gestor, que resalta que el hecho de que el volumen de oro englobado en los ETFs haya demostrado resistencia "es alentador" e indica que "los compradores de ETFs son más inversores que especuladores".
Según sus datos, la demanda para joyería –inexistente durante el verano debido a los altos precios– está retornando. "Los joyeros –que estaban agotando sus inventarios y temían entrar en el mercado del oro en sus niveles más altos– están reponiendo sus existencias dado que los trimestres cuarto y primero de cada año natural suelen ser el periodo de mayor consumo de oro", señala.
Motores alcistas ocultos
"Así pues, los factores fundamentales que impulsaron el oro por encima de 700 dólares/onza a principios de año no han desaparecido. Simplemente, están enterrados bajo el peso del momentum que persigue al dinero caliente que pulula en torno al mercado", dice Hambro.
El responsable de esta firma prevé algunas revisiones alza significativas de los beneficios totales de las compañías productoras para este año y el próximo. "Esperamos un aumento significativo de los márgenes que probablemente conduzca a un gran salto en los flujos de caja. El incremento de los beneficios subyacentes significa que las acciones de los productores de oro están más baratas que en varios años", concluye.