El barómetro de la incertidumbre marca nuevos récords en 26 años por la renovación de las preocupaciones sobre Irán.
EEUU ha contestado al presidente iraní que no ha reducido su determinación en impedir que siga enriqueciendo uranio.
Tras la apertura de Wall Street, la onza con vencimiento en agosto sube más del 2% y supera los 700 dólares, mientras que el contrato con entrega en julio ronda los 693 dólares por onza troy (equivalente a 31,1 gramos). Se trata de niveles no vistos desde finales de 1980, tras el estallido de la guerra entre Irán e Irak.
El propulsor de estas alzas vuelve a salir de Irán, tras la sucesión de un nuevo capítulo de desencuentro en las relaciones con Occidente. El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, envío una carta al presidente de EEUU, George W. Bush, instándole a mejorar las relaciones entre ambos países. La Casa Blanca ha respondido con dureza y señala que no ha reducido su determinación en impedir que siga enriqueciendo uranio.
La cotización del oro navega en estos momentos en niveles no vistos desde finales de 1980, en plena tensión bélica internacional por la guerra entre Irán e Irak. Por entonces los precios de la energía estaban en niveles desorbitados, en términos similares a los actuales, y la cotización del oro caminaba sobre los 700 dólares. Pero, ¿desde cuándo y cuáles son las claves de la escalada del precios del oro?