El acusado de intentar matar con cuchillo a la expareja de su mujer: "Fue fortuito"

Madrid, 8 mar (EFE).- Un hombre acusado de intentar matar a cuchilladas a la expareja de su mujer, con la ayuda de ésta, se ha declarado hoy inocente y ha asegurado que las heridas del agredido se produjeron de forma "fortuita" durante una pelea entre ambos en la localidad madrileña de Móstoles en octubre de 2010.

Los acusados Jesús J.M. y su mujer, Gema María C.R, han declarado en el juicio que se ha celebrado contra ellos en la Audiencia Provincial de Madrid por un delito de homicidio en grado de tentativa y otro de lesiones.

Por estos hechos, la Fiscalía solicita para cada uno de los acusados una pena de nueve años y seis meses de prisión.

Según el informe del fiscal, en octubre de 2010 los acusados urdieron un plan para acabar con la vida de la expareja sentimental de Gema, después de que ella y la víctima acudieran esa misma mañana a una vista judicial para decidir sobre la guardia y custodia de la hija que tuvieron fruto de la anterior relación.

Para ello, acudieron al domicilio de la expareja de la acusada, en la localidad madrileña de Móstoles, provistos de un cuchillo.

Jesús J.M. ha negado en su declaración que él portara el cuchillo que hirió en el abdomen y en el tórax a I., la expareja de la acusada, y ha asegurado que fue el propio agredido quien bajó de su casa con el arma con la intención de agredirle tras un intercambio de amenazas a través del teléfono.

"Yo le arrebaté el cuchillo y las heridas fueron sin querer", ha explicado, y ha añadido que en ningún momento tuvo la intención de acabar con la vida de I.: "Si hubiera querido matarle, las heridas hubieran sido peores".

Por su parte, Gema María C.R. ha ratificado la versión del otro acusado y ha negado que mientras Jesús golpeaba a I. en el suelo ella gritara "mátalo, mátalo", tal y como sostiene el fiscal en su escrito, sino que en todo momento trató de evitar el enfrentamiento.

Hoy también ha comparecido la víctima de la agresión, quien ha relatado que cuando bajó de su casa hacia la calle, el acusado se abalanzó sobre él y le asestó dos puñaladas.

Al tiempo que escuchó "claramente" cómo Gema instaba al acusado a matarle, algo que según dice no se le "olvidará en la vida".

Los padres de la víctima, que han comparecido en el juicio como testigos, han corroborado las palabras de su hijo y, en concreto, la madre ha explicado que Gema le agarró del cuello para evitar que pudiera auxiliar a I. de sus heridas por arma blanca.

Por último, también han declarado agentes de la Policía Local, quienes acudieron al lugar de los hechos al ser alertados por un peatón.

Allí, han continuado, sorprendieron a los acusados, que trataron de darse a la fuga, pero uno de los agentes logró alcanzar a Jesús J.M. aún con el cuchillo en la mano.

El acusado, que ha usado su derecho a la última palabra para insistir en que no tuvo intención de acaba con la vida de la expareja de su mujer, permanece en prisión provisional por estos hechos, mientras que la acusada estuvo en el mismo régimen hasta este mismo mes, cuando fue puesta en libertad.