Lima, 1 jul (EFE).- La ley contra el crimen organizado entró hoy en vigencia en Perú para fortalecer las acciones de inteligencia de la Policía Nacional y dar protagonismo a la figura del agente encubierto, afirmó el presidente del Consejo de Ministros, René Cornejo.
"Vamos a investigar, capturar y procesar a todas las bandas criminales" en el país, declaró Cornejo a la prensa, tras precisar que se han capacitado 2.000 policías en Perú para aplicar la nueva legislación.
El funcionario explicó, después de una sesión del Acuerdo Nacional, que la ley introduce cambios fundamentales para enfrentar diversos delitos asociados a la criminalidad y los cometidos contra la administración pública.
La inseguridad ciudadana y la amenaza del crimen organizado son los principales problemas que afronta el Gobierno, según la percepción de los ciudadanos en los sondeos, ya que el 40 % dijo haber sido víctima de la delincuencia en 2012.
La Ley contra el crimen organizado es una norma propuesta por el Poder Ejecutivo para luchar contra las bandas organizadas y facilitar la labor coordinada de la Policía Nacional, el Ministerio Público y el Poder Judicial.
Los delitos cometidos por más de tres personas recibirán la definición de organización criminal y se procesará a los que incurran en homicidio calificado, sicariato, seguimiento y secuestro, trata de personas, tráfico ilícito de drogas y pornografía infantil.
Asimismo, los delitos de estafa, extorsión y delitos informáticos; tenencia, fabricación y tráfico ilícito de armas, municiones y explosivos; delitos ambientales, genocidio, desaparición forzada y tortura, lavado de activos, terrorismo, delitos tributarios, entre otros.
Los cabecillas de las organizaciones criminales y sus tesoreros que utilicen menores de edad o armas de guerra, recibirán hasta 35 años de prisión y no tendrán beneficios penitenciarios.
Como parte de la entrada en vigor de esta ley, el Consejo Ejecutivo del Poder Judicial (CEPJ) dispuso la creación de 60 juzgados y salas especializados para los delitos de crimen organizado en las Cortes Superiores donde aún no está en vigencia el nuevo Código Procesal Penal.
Además, se implementará un sistema informático que almacene toda la información correspondiente a los internos vinculados a una organización criminal con un registro detallado de las visitas que reciben.
La nueva ley también introduce técnicas especiales de investigación, como la interceptación postal e intervención de las comunicaciones, el agente encubierto, el seguimiento y la vigilancia, y establece la obligatoriedad de colaboración de todas las personas e instituciones públicas y privadas para perseguir e investigar a las organizaciones criminales.
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