Bogotá, 14 abr (EFE).- Otros dos jóvenes fueron asesinados y sus cuerpos descuartizados en la ciudad colombiana de Buenaventura, cuya seguridad reforzó el Gobierno en marzo con fuerzas militares ante la violencia entre bandas criminales, según informaron hoy fuentes oficiales.
El director del Instituto de Medicina Legal, Carlos Eduardo Valdés, afirmó en RCN La Radio que los cadáveres fueron hallados este fin de semana y están en curso las pruebas forenses para su identificación.
Según Valdés, los cuerpos, hallados en bolsas de plástico, pertenecían a dos jóvenes, uno de 22 años y otro de apenas 16, cuyo asesinato es el primero que se conoce desde que hace 22 días el Gobierno enviara a 700 policías, soldados e infantes de marina para reforzar la seguridad.
Con ese envío, las fuerzas totales de seguridad en esta ciudad colombiana costera del Pacífico alcanzan 2.400 efectivos.
El obispo de Buenaventura, monseñor Héctor Epalza, quien habló en la misma emisora, afirmó que las medidas de seguridad tomadas por el Gobierno después de que se conocieran las crudas consecuencias de la guerra de bandas criminales en el puerto "han servido bastante porque se han tenido 22 días sin ningún asesinato".
Pero advirtió que "el mal está enquistado y arraigado en Buenaventura, lo que genera pavor y miedo en la población. Por eso sigo insistiendo en que se requiere de una real inversión social que contribuya a mejorar la situación de la población".
Monseñor Epalza afirmó que en lo que va de año se han encontrado trece cadáveres descuartizados y convocó a la comunidad a vencer el miedo y denunciar.
Buenaventura sufre una sangrienta guerra entre las bandas criminales de Los Urabeños y La Empresa, ambas herederas de los paramilitares, que se disputan el tráfico de drogas y armas en ese estratégico puerto del Pacífico.
Esta oleada de violencia ha convertido a Buenaventura, con medio millón de habitantes, en la ciudad de Colombia con el mayor número de personas desplazadas y de desapariciones forzadas, así como decenas de asesinatos, algunos por descuartizamiento.
Para paliar esta situación, el presidente Juan Manuel Santos anunció un crédito cercano a los 400 millones de dólares para generar empleo y fomentar la inversión, así como inversiones para construir 341 viviendas gratuitas que usarán desplazados y un colegio para 2.400 estudiantes.