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Economía/Legal.- Un acusado de ayudar a su padre a estafar 837.000 euros a dos bancos se autocalifica de "becario"

El joven de 27 años acusado de ayudar a su padre a estafar más de 837.000 euros a sendas entidades bancarias emitiendo facturas duplicadas de su empresa de venta de material de oficina negó hoy su relación con los hechos que le imputan y aseguró que su función era la de un becario. "Era el chico de los recados porque iba a por café, hacía fotocopias o descargaba camiones, pero de contabilidad no tengo ni idea", dijo.

SEVILLA, 6 (EUROPA PRESS)

En su declaración en la Audiencia Provincial de Sevilla, el procesado H.L.A., para quien la Fiscalía reclama cinco años de cárcel y las acusaciones particulares seis años, sostuvo que él no manejaba ordenadores en la empresa para falsificar facturas y dijo desconocer las pólizas de descuento que habían concedido los dos bancos, es más, aseguró incluso que "nunca" ha llevado documentación a ninguna entidad.

"Yo hacía una especie de prácticas, no tenía ninguna responsabilidad", aseguró el sujeto, quien agregó que "no tenía ni idea de lo que pasaba por allí". "Yo lo único que hacía con las facturas de venta de muebles era meter los datos en un ordenador".

Uno de los letrados de las acusaciones particulares dijo al acusado que "para no saber nada era un becario muy avanzado" porque cuando cerró la empresa de su padre montó él una propia que también se dedicaba a la venta de muebles de oficina.

El principal acusado, J.M.L.R. no ha acudido a la vista oral porque, según confirmó el propio abogado y su hijo, "ha sufrido un infarto y se encuentra en estado de depresión superior", circunstancia que ha sido acreditada por un médico forense.

De esta manera, la vista continuará mañana en la Sección Cuarta de la Audiencia sevillana, aunque sólo se enjuiciará al hijo del acusado, quedando la causa del padre para cuando mejore su situación personal.

LOS HECHOS.

Según el escrito de acusación provisional del fiscal, al que tuvo acceso Europa Press, el padre, J.M.L.R., "con la finalidad de obtener un fácil beneficio económico a través de la póliza suscrita" en 1997, tuvo la idea de presentar facturas supuestamente emitidas por distintos ayuntamientos y organismos "que no correspondían a operaciones comerciales realizadas" y que habían sido elaboradas en ordenador por el hijo del principal inculpado.

El Ministerio Público asegura que H.L.A. escaneaba las firmas y sellos auténticos de los organismos públicos "obtenidos de la documentación verdadera que obraba en su poder a causa de las relaciones que habían mantenido con anterioridad" para, posteriormente, cobrar las facturas por medio de la póliza, a pesar de que ya las había cobrado previamente por transferencia a otro banco o por cheque.

De esta manera, los procesados consiguieron cobrar facturas falsas de los consistorios de Espiel (Córdoba); Villanueva de Algáidas y Arriate, en Málaga; Mancomunidad de Lepe-Isla, Aroche y Cortegana, en Huelva; Castellar de la Frontera, en Cádiz; Morón de la Frontera, Pruna, Santiponce, Mairena del Alcor, Las Cabezas de San Juan, Alanís y Algamitas, en Sevilla; y Vélez-Rubio, en Almería.

Por ello, el Ministerio Público considera que los hechos relatados son constitutivos de un delito continuado de estafa y de un delito continuado de falsedad, por lo que reclama cinco años de prisión para cada inculpado y que éstos abonen el total del dinero adquirido ilícitamente.

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