Ecoley

Teoría sobre soluciones a la crisis derivada de la especulación a crédito

Imagen: Archivo

La idea del colapso de la espiral inversa, que no tiene utilidad en el campo de las matemáticas, por su carácter finito, sin embargo puede tener utilidades en el campo de la economía, en concreto para la explicación del fenómeno causado por la especulación a crédito. Esta semana y la que viene les desvelaremos todas las claves de esta teoría.

La espiral de Arquímedes (también espiral aritmética) se define como el lugar geométrico de un punto moviéndose a velocidad constante sobre una recta que gira sobre un punto de origen fijo a Velocidad Angular constante.

Esta espiral nace en su centro y se mueve hacia afuera, de manera infinitesimal, gracias a un coeficiente que es siempre positivo, que se forma por la suma de dos coordenadas y puede ser descrito por la siguiente ecuación

La pregunta que cabe formular entonces es averiguar qué ocurre si el coeficiente de la espiral en un momento determinado deja de ser positivo y se convierte en un número negativo (-r ). La respuesta parece clara, si el coeficiente que da vida a la espiral pasa de ser positivo a negativo, la espiral deja de moverse hacia afuera y empezará a moverse hacia dentro hasta colapsarse, dejando de ser infinita. Es la figura de la espiral inversa.

Esta idea del colapso de la espiral inversa, que no tiene utilidad en el campo de las matemáticas, por su carácter finito, sin embargo puede tener utilidades en el campo de la economía, en concreto para la explicación del fenómeno causado por la especulación a crédito.

Especulación a crédito de la clase media

Durante los últimos años he tenido la oportunidad de participar en diversos encuentros, foros y mesas redondas en las que se me invitaba a proponer soluciones a la crisis económica actual a partir de mi experiencia en los Juzgados de lo Mercantil, y en todas las ocasiones he aprovechado para dar a conocer herramientas y procedimientos, como la dación en pago, que han demostrado su validez una vez se ha generalizado su aplicación.

Sin embargo, también estos planteamientos han tropezado con problemas en su comprensión que, considero, debidos, en gran parte, a las dificultades para realizar un diagnóstico exacto de la actual situación. Por eso, es conveniente, antes de recordar las soluciones, volver a detenerse en las causas de la crisis en las que nos encontramos inmersos.

Para ello es bueno utilizar la perspectiva histórica y comparar lo que viene sucediendo desde 2007 con la otra gran crisis del capitalismo moderno - la derivada del crack bursátil del 29 - y establecer los paralelismos correspondientes. En ambos casos, nos encontramos un elemento común y desencadenante: la especulación a crédito asociada a las clases medias.

Como es conocido, durante los felices años veinte, el consumo a crédito característico de las clases medias, unido a los bajos intereses, generó una vorágine compradora, entre otras, de las acciones de sociedades cotizadas en bolsa, que las hizo subir de precio en una espiral casi interminable. Luego, el calentamiento de la economía hizo el resto, subiendo los intereses de los préstamos concedidos por las entidades financieras, disuadiendo finalmente a los potenciales compradores.

Esta situación terminó por reventar el mercado bursátil, al convertirse el precio de las acciones en puramente ficticio, y los bancos dejaron de prestar dinero para comprar nuevas acciones, de tal manera que ya nadie tenía o bien la capacidad o bien la intención de invertir en la Bolsa, que se desplomó.

Similitudes con la actualidad

Las similitudes con lo sucedido ochenta años después son evidentes, con la diferencia de que el foco del problema se ha situado ahora en los bienes inmobiliarios, que han sustituido en nuestro país a los títulos bursátiles como principal factor de especulación y, al tiempo, principal aval de cara a la concesión de nuevos créditos.

De nuevo, hemos vivido unos años de esplendor del consumo de las clases medias vinculado a los créditos que los bancos otorgaban masivamente y que los ciudadanos podían ir afrontando gracias a unos tipos de interés bajos.

Y, una vez más, el despertar ha sido muy duro, con un aumento de precios que ha hecho elevar, a su vez, los créditos y las hipotecas, hasta que muchas empresas y familias han comprometido su viabilidad.

En la época de la gran depresión la economía de EEUU, y como consecuencia la mundial, se vio inundada de una gran cantidad de acciones fuera de mercado.

Ahora ocurre lo mismo con un número creciente de inmuebles, cuyas hipotecas no han podido ser afrontadas y que vuelven a unas entidades financieras que, a su vez, no pueden venderlos a los precios de tasació n, porque no encuentran comprador, y que deben restringir el crédito por la falta de liquidez.

La espiral inversa como explicación

Si antes definíamos la espiral inversa como aquella situación en la que la espiral deja de moverse hacia afuera y empieza a moverse hacia dentro hasta colapsarse, quizás haya llegado el momento de aprovechar ahora la oportunidad de poner sobre la mesa los datos que nos ofrece la realidad actual y podamos obtener la formulación que nos permita explicar de una manera definitiva qué es lo que está pasando, y cuáles son las medidas apropiadas para obtener una solución.

Este contexto económico, que he definido en varias ocasiones con la forma clásica del círculo vicioso, debe ser quebrado en algún punto para reactivar un mercado estancado.

En este sentido, y centrándonos en los paralelismos evidentes de la espiral inversa y la situación de colapso actual, sobre todo y fundamentalmente en el mercado inmobiliario y financiero, cabe extraer las siguientes conclusiones.

Esto es y en primer lugar, que la especulación a crédito se encuentra desde luego en la causa del problema; en segundo lugar, que es necesario formular de manera precisa y en términos matemáticos la descripción de la especulación a crédito; y en tercer lugar, una vez obtengamos la formulación, habremos de extraer de ella las conclusiones necesarias para la obtención de una solución.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky