Ecoley

El sobreviviente de la masacre en México consigue hablar con sus padres en EE.UU.

Nueva York, 26 ago (EFE).- El joven ecuatoriano que sobrevivió a la matanza de inmigrantes en México habló por primera vez con sus padres, que residen en Nueva Jersey, después de que logró escapar del rancho en Tamaulipas donde fueron asesinadas 72 personas.

"Papi, estoy todavía vivo, no estoy muerto", dijo Luis Freddy Lala Pomavilla a su padre, según explicó éste al Canal 41 de la cadena de televisión Univisión, que entrevistó al matrimonio en su hogar de Estados Unidos y bajo condición de no revelar sus nombres por razones de seguridad.

Los padres del joven, que viven en la ciudad de Newark (Nueva Jersey), expresaron el dolor que sienten al ver en una fotografía las condiciones en que se encuentra su hijo en el hospital de México donde se recupera.

La madre del menor, que tiene 17 años y que cumplirá años la semana próxima, apenas podía hablar ahogada por el llanto, pero logró asegurar que quiere saber hasta cuándo estará su hijo en el hospital y lo que tardará en poder verlo.

"Quiero saber con el doctor cuándo le van a dar de alta, adónde lo van a mandar o qué va a pasar. Sólo Dios sabe, lo pongo en manos de Dios", dijo la madre.

Luis Freddy Lala Pomavilla, que recibió una herida de bala en el cuello y sobrevivió a la matanza porque se hizo pasar por muerto, logró avisar a la Policía sobre la masacre en la que murieron 54 hombres y 18 mujeres que le acompañaban en su intento de llegar a EE.UU.

El joven es oriundo de la comunidad campesina de Zer, una localidad de unas 400 personas en la zona andina del sur de Ecuador, donde vivía con su mujer, Angelita Lala, embarazada de cuatro meses, la única persona a la que le reveló que iba emprender el peligroso camino hacia el norte.

Las autoridades mexicanas investigan las afirmaciones del testigo de la matanza de que los asesinados eran inmigrantes que querían llegar a EE.UU. y fueron víctimas de un grupo armado, que identificó como el cartel de "Los Zetas", una violenta organización criminal que opera en el este y nordeste de México.

Además, las autoridades trataban hoy de identificar a las 72 víctimas de la matanza con ayuda de diplomáticos de cuatro países, mientras los investigadores barajan la hipótesis de que fueron asesinados por negarse a entrar al servicio del crimen organizado.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky