Madrid, 10 feb (EFE).- La portavoz del grupo parlamentario popular en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, ha asegurado hoy que "la práctica totalidad" de los militantes de su partido es "gente honorable y trabajadora" con "vocación de servicio público".
La dirigente del PP se ha mostrado partidaria, en rueda de prensa, de que se actúe con "toda contundencia" si de las investigaciones que dirige el juez Baltasar Garzón se derivasen "hechos que van en contra de los criterios y principios" del Partido Popular, "la honorabilidad y la honradez".
Antes de la comparecencia ante los medios, Sáenz de Santamaría había dicho en una cadena de televisión que, en una tesitura como la que sacude ahora al partido, algunos de cuyos cargos municipales están imputados en el caso sobre una presunta trama empresarial de corrupción, lo más adecuado es "sacar del cesto" las manzanas que no sean buenas.
A esas declaraciones se ha remitido la portavoz popular unas horas más tarde, así como a las palabras de ayer del presidente del PP, Mariano Rajoy, que decidió abrir una investigación interna con el fin de depurar con contundencia cualquier responsabilidad, si la hubiera.
Sáenz de Santamaría ha defendido la presunción de inocencia de los ciudadanos, por lo que ha secundado las peticiones de amparo transmitidas ayer por su partido al Consejo General del Poder Judicial ante lo que considera unas filtraciones atentatorias contra el Estado de Derecho.
Según ha recalcado la portavoz, el PP es el "primer interesado" en "llegar hasta el final", aunque siempre en cumplimiento de la ley.
Por ello, su grupo registrará hoy en la Cámara una iniciativa para que el fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, explique en sede parlamentaria el protocolo general de actuación de la Fiscalía cuando sobre ciertos casos se aplica el secreto sumarial, y, sin embargo, su contenido es conocido debido a filtraciones del mismo.
Asimismo, la portavoz de los populares en el Congreso ha expresado su deseo de que tales casos no eclipsen la importancia del debate económico que hoy mismo vivirá la Cámara, ya que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, acude a explicar sus medidas contra la crisis, especialmente contra el paro.
Si esto sucediera, "sería una falta de respeto a los tres millones de parados, una absoluta e indecorosa falta de respeto por quien desviara ese debate".