
Yelmo Cines ha sido multado con 30.001 euros por el Instituto de Consumo Vasco (Kontsumobide), después de impedir a los usuario el acceso a sus instalaciones con alimentos comprados en el exterior.
FACUA Euskadi presentó una denuncia contra la empresa el pasado mes de enero al considerar que "incurría en una cláusula abusiva" al prohibir el acceso a sus salas con comida y bebida adquirida fuera sus salas, reservándose en consecuencia el derecho de admisión a las mismas.
En su escrito, FACUA Euskadi señalaba que "la actividad principal de un cine es la exhibición de películas y no la restauración, por lo que no resultaba válido que se acogieran a esta excusa para impedir la entrada con comida y bebida del exterior cuando, además, dentro del propio recinto pueden adquirirse alimentos".
Yelmo, a los tribunales
Por su parte, FACUA-Consumidores en Acción ha recordado que en el mes de mayo llevó a los tribunales a Yelmo Cines precisamente por no permitir el acceso a sus salas con comida del exterior. La asociación interpuso una acción de cesación en los juzgados de primera instancia de Madrid al considerar que la cadena incurre con ello en una cláusula abusiva con la que limita los derechos de los consumidores.
La asociación de consumidores detalla que Yelmo Films SLU es la segunda cadena de exhibición cinematográfica del país, con más de 500 salas en 23 provincias. En todos sus cines cuenta también con establecimientos de venta de bebidas y comestibles, donde vende productos a precios hasta 13 veces más caros que los que pueden encontrarse en otros establecimientos, asegura.
En este sentido, FACUA resalta que según puede verse en el menú de uno de los establecimientos de la empresa en Madrid, si el usuario quiere o necesita hidratarse durante la sesión, tiene que pagar hasta 2,70 euros por una botella de agua de 50 centilitros y 4,95 euros por una Coca-Cola de 50 centilitros. Mientras que en un supermercado, una botella de agua mineral de las misma capacidad puede encontrarse desde los 20 céntimos y una botella de Coca-Cola de 50 centilitros por 1,39 céntimos.
Derecho de admisión
FACUA explica en su demanda que la cadena tiene en sus salas carteles con el texto "la compañía no permite el acceso a estas instalaciones con alimentos y/o bebidas adquiridas fuera de Yelmo, reservándonos por tanto el derecho de admisión". Una advertencia que también realiza en su página web al vender las entradas.
La empresa pretende ampararse en el ejercicio de un supuesto derecho de admisión que, según advierte FACUA en su demanda, "resulta contrario a la legislación". La asociación argumenta que el servicio de ambigú no es la actividad esencial definitoria del cine, por lo que no puede ejercer ese derecho de admisión "como si se tratase de un restaurante".
"La actividad de exhibición cinematográfica existe con independencia de que la empresa ofrezca un servicio de ambigú, no requiriendo a este para la existencia de aquel. Se trata, por lo tanto, de un servicio complementario y el motivo principal por el que los usuarios acuden a Yelmo es para ver una película, no para comprar comida o bebida", señala el escrito.
Actualmente, este procedimiento se encuentra todavía pendiente de la celebración del juicio y su posterior resolución.