
La Comisión Europea ha presentado este miércoles una propuesta de directiva para ampliar el uso de las herramientas y procesos digitales en la legislación empresarial con la creación de sistema que vincule los registros mercantiles a nivel europeo.
Lo que plantea la Comisión Europea es la creación de un procedimiento único para que las empresas no tengan que presentar información múltiples veces cuando creen una sucursal o una empresa en otro Estado miembro. De manera que se podrá intercambiar información a través de un sistema de interconexión de registros mercantiles.
La propuesta del Ejecutivo comunitario busca reducir los trámites burocráticos para las empresas que operan en más de un Estado miembro, lo que redundaría en un ahorro de 437 millones de euros de carga administrativa al año a través de un certificado de empresa de la UE, según datos de la Comisión Europea. La medida se aplicará a unos 16 millones de sociedades en la UE y a dos millones de asociaciones empresariales.
En este sentido el comisario de Justicia, Didier Reynders, ha señalado la intención de "modernizar la cooperación judicial en la UE" y que se centra "especialmente en pymes que operan en más de un país para eliminar los obstáculos para la actividad de las compañías".
La medida, que pasará a ser ahora debatida por el Consejo de la UE y el Parlamento Europeo, también busca que la información sobre las empresas sea pública a nivel comunitario en un registro mercantil. Para lo que se hace necesario adaptar la normativa europea para empresas a los nuevos retos digitales.
Por otro lado, pretende facilitar la búsqueda de información sobre compañías en la UE a través del registro mercantil y de otros dos sistemas interconectados: el registro nacional de titularidad real y el de insolvencia. Y para asegurar que los datos de las empresas en los registros mercantiles son fiables y están actualizados se realizarán análisis cada vez que una firma se registre en un Estado miembro.
La norma contempla un certificado empresarial europeo que contenga la información básica de las empresas y que estaría disponible de forma gratuita en todos los idiomas de la UE. También plantea crear un modelo estándar de poder digital para que una persona pueda representar a una empresa en otro Estado miembro y, de paso, eliminar tramites como la apostilla o las traducciones juradas para los documentos empresariales.
Además, Reynders ha puntualizado que el objetivo aumentar la transparencia de los negocios, mejorar la confianza sobre los procesos administrativos y eliminar la burocracia para las empresas con operaciones transfronterizas.
Así, la intención de esta norma es fomentar las operaciones empresariales transfronterizas y aumentar la transparencia de las empresas haciendo pública a nivel comunitario información relativa a las compañías. Además, ayudará a la digitalización de las empresas y empujará a las pymes a operar en el mercado comunitario