El conflicto por el abandono de los anunciantes de La Noria aún colea, y es que el periodista de ABC Radio, Melchor Miralles ha dado a conocer un estudio que pone de manifiesto que la campaña que llevó a cabo el bloguero Pablo Herreros estuvo orquestada desde personas con intereses para realizar daño a Telecinco y no "por personas que de modo espontáneo se sumaron", apunta el blog del periodista.
El estudio, cuya fuente Miralles no ha querido poner de manifiesto y no ha puesto a disposición pública, asegura que la mayoría de los perfiles que secundaron la iniciativa de Pablo Herreros se corresponden a perfiles falsos entre el 43% y el 58%, mientras que otro 38% y 49% son de "dudosa credibilidad", con lo cual sólo se correspondieron como auténticos el 15% de perfiles que se dirigieron a El Corte Inglés, el 8% a Puleva y Audi, el 7% a Vodafone, el 5% a Vital Dent y Bayer y el 4% a Securitas, Campofrío y Chicago Musical.
Además, el estudio también pone en duda la reacción espontánea en la red social Tuenti, ya que seprodujeron un 84% de menciones negativas a las marcas y solo un 8% positivas escudándose que es "una red en la que se mueven personas con una edad media de 16 años" y "los expertos consultados consideran consideran imposible que de modo espontáneo chicos de esas edad sean consumidores a la vez de todos esos productos, e incluso dudan que todos ellos fueran espectadores de La Noria".
El resultado del estudio ha sorprendido en antena tanto al bloguero impulsor de la iniciativa, como a Manuel Villanueva, director general de Telecinco. Éste último ha confesado que se encontraba "no salgo de mi perplejidad", aunque ha confesado que "manteníamos alguna sospechas, que ahora se confirman con vuestra investigación". Y es que "cuando se produce alguna anomalía o algo que no gusta a los espectadores, lo normal es que la reacción el ataque va frontalmente contra el programa, y curiosamente aquí hay una desviación del rumbo, (...) sospechosamente contra los anunciantes del programa", comentaba Villanueva.
Pablo Herreros, "alucinado"
Posteriormente, entró en antena el insiprador del movimiento Pablo Herreros, incapaz tampoco de dar crédito al estudio comentado por Miralles, y se confesó "alucinado", quien siguió reiterando que se mostraba "muy orgulloso de la iniciativa completamente limpia, de un montón de ciudadanos, que se llevó a cabo porque no es sano que se entrevistara y se pagara a la madre de un criminal, porque recuerdo que el chaval estaba condenado por esconder un cadáver".
Ante esto, Miralles, insitió que el debate se centraba en la cantidad de usuarios falsos creados a través de ad hoc que apoyaron la iniciativa, y no en el contenido de la entrevista de Telecinco, algo que Herreros confesó que "si eso hubiese pasado sería lamentable, pero alguien ha torcido los datos para que eso sea así".
A la pregunta de Miralles de por qué no hizo este tipo de iniciativas contra otros programas de televisión que ya habían llevado entrevistas de este tipo anteriormente, Herreros confesó que cambió su modo de operar "he pedido primero que los políticos legislaran, segundo que las cadenas rectificaran y tercero, como ninguna de las dos cosas funcionó durante cuatro años, se me ocurrió lo de los anunciantes, lo hice y funcionó. Al tiempo que recalcó que "no tengo nada contra Telecinco, y seguramente habría salvado su programa si en vez de haberse inventado una realidad paralela, hubiese salido confesando que se habían confundido".
Polémica en Twitter
Herreros insiste en su cuenta de Twitter que "lo correcto hubiera sido dejarme leer el estudio (publicarlo o enviármelo) y después entrevistarme, @melchormiralles. Al revés es feo :(", al tiempo que no entiende que se "intente desprestigiar un movimiento que fue limpio y sin orquesta ninguna".
Por su parte, Melchor Miralles se ha defendido en Twitter de que las acusaciones no van contra Pablo Herreros o contra quienes criticaban a La Noria, sino "otras personas sin identificar".
Primeras consecuencias del boicot a La Noria