
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha confirmado que su Gobierno iniciará este domingo redadas masivas en diez ciudades del país para deportar a "miles" de indocumentados, y ha indicado que planea visitar en algún momento un centro de detención para inmigrantes. Según una información del diario The New York Times, entre las ciudades que están en el punto de mira de Trump se encuentran Chicago, Baltimore, Nueva York o Miami.
En declaraciones a los periodistas en la Casa Blanca, Trump ha respondido afirmativamente al ser preguntado si es cierto que el Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés) empezará sus redadas este domingo, como ya habían adelantado varios medios de comunicación.
Autoridades de inmigración comenzaron a llegar el viernes al área agrícola de Immokalee, en el suroeste de Florida y con gran población hispana, como parte del plan de redadas masivas del presidente de EEUU. Residentes de Immokalee, en el condado de Collier, han informado de una fuerte presencia de oficiales del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés).
En una información publicada el pasado jueves, The New York Times, citando a dos funcionarios y a un extrabajador del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés), detalló que en esas redadas las autoridades podrían detener a inmigrantes "que estén en el área aún cuando ellos no fueran los buscados".
El Servicio de Inmigración buscará primero a unas 2.000 personas que ya han recibido órdenes de deportación
"En la medida en que sea posible, los miembros de familias arrestados juntos serán llevados a centros de detención para familias en Texas y Pensilvania. Pero, debido al espacio limitado, algunos podrían terminar en hoteles mientras se preparan sus documentos de viaje", ha relatado el rotativo.
Los funcionarios consultados señalaron que el Servicio de Inmigración buscará primero a unas 2.000 personas que ya han recibido órdenes de deportación y que, en algunos casos, no se presentaron a las audiencias en los tribunales.
Entre las ciudades donde podrían ocurrir esas redadas se cuentan Chicago, Baltimore, Nueva York, Houston, Los Ángeles y Miami. El pánico se ha extendido entre los inmigrantes sin papeles de estas urbes, que apostarán por mantenerse a resguardo en sus casas, ya que las autoridades de inmigración no pueden acceder a ellas sin una orden judicial con nombres de personas sobre las que se haya resuelto ya una expulsión legal en firme.
Críticas de los demócratas
Por su parte, la presidenta de la Cámara Baja de EEUU, la demócrata Nancy Pelosi, ha criticado que el presidente estadounidense, Donald Trump, utilice la amenaza de redadas masivas "brutales" contra inmigrantes indocumentados con el objetivo de infundir miedo.
"Estas acciones brutales van a aterrorizar a niños y separarán a muchas familias. (...) Las familias deben permanecer unidas; todos en nuestro país tienen derechos. Oramos para que el presidente cambie de opinión", ha clamado Pelosi desde el Capitolio.
La política ha subrayado la importancia de proteger a los niños de familias indocumentadas y señaló que muchos de estos núcleos familiares tienen miembros con distintos estatus legales. El New York Times ha advertido en su información que las redadas podrían derivar en la separación de miembros de la misma familia. "En la medida en que sea posible, los miembros de familias arrestados juntos serán llevados a centros de detención para familias en Texas y Pensilvania. Pero, debido al espacio limitado, algunos podrían terminar en hoteles mientras se preparan sus documentos de viaje", según ha relatado el diario neoyorkino.