
A la tercera fue la vencida. El candidato inesperado y más pintoresco de las primarias para elegir un nuevo líder del Partido Conservador británico, Rory Stewart, cayó eliminado y sus apoyos se dibujan decisivos para elegir al rival de Boris Johnson: sus dos principales rivales terminaron casi en empate técnico.
Tras la nueva ronda de votación entre los diputados, Stewart perdió 10 votos respecto a ayer, cayendo a 27, un resultado que nadie sabía explicar. Mientras su campaña apuntaba a "artes oscuras", algunos diputados señalaban a los medios que habían quedado decepcionados por su actitud en el debate del martes en la BBC y otros decían que habían optado por apoyar a un candidato con opciones de llegar hasta el final.
Los supervivientes son cuatro. Boris Johnson sigue primero y sin romper la barrera del 50%, con 143 votos (17 más que el martes). Por detrás, una pelea encarnizada por el segundo puesto: Jeremy Hunt, con 54 votos (8 más) y Michael Gove, con 51 (10 más). A la cola, Sajid Javid, con 38 (6 más) es el favorito para ser el siguiente eliminado.
¿Coalición Gove-Stewart?
Por la mañana, Stewart mencionó la posibilidad de unirse a la campaña de Gove, con el que quedara eliminado de los dos actuando como mano derecha del otro. Es posible que el candidato revelación prefiera quedarse fuera de la lucha y cultivar su perfil para la siguiente oportunidad, como dejó caer en un tuit poco después de conocer el resultado: "No he conseguido que suficientes diputados crean en mí hoy - pero lo harán :)". Sin embargo, la señal del candidato al que apoya está lanzada, y sus 27 seguidores pueden marcar la diferencia entre Gove y Hunt.
La identidad del rival de Johnson en la votación de la militancia del partido se conocerá este jueves, tras dos rondas eliminatorias más. El superviviente tendrá un mes para convencer a los suyos de que es mejor opción del exalcalde de Londres. Porque, salvo sorpresa histórica, los diputados ya tienen más que clara su decisión.