
El departamento de I+D del Ejército de EEUU se encuentra en constante desarrollo de soluciones que permitan a sus activos en combate ser más precisos y letales.
Para ello, han desarrollado una serie de robots, algoritmos, sistemas de inteligencia artificial y naves no tripuladas en los últimos años, sin embargo, el laboratorio de investigación del ejército de EEUU (US Army Research Laboratory, en inglés) ha puesto el acento en que sus soldados de infantería puedan ser más precisos en combate cuando manejan armamento pesado.
Para ello, el ingeniero Dan Baechle ha ideado un exoesqueleto con un brazo mecánico que funciona como una tercera extremidad, lo que sirve para estabilizar armas pesadas de gran calibre y alivia el peso que tendrían que soportar los brazos, que ahora se encargarán principalmente de centrar el disparo.
El dispositivo bautizado como Third Arm (tercer brazo) no necesita baterías, es liviano (1,8 kilos) y está diseñado de tal forma que puede distribuir uniformemente la carga de armas como las ametralladoras M240B o M249 de casi 13 y 10 kilos de peso, respectivamente.
La clave del brazo mecánico es que su diseño permite que tanto el peso del dispositivo como el del arma se distribuyen uniformemente y se consigue un equilibrio para el soldado.
"Puede ayudar a estabilizar el arma y quitar la carga de los brazos. Está hecho de materiales compuestos para que sea lo más ligero posible, pero también para garantizar el rango de movimiento que los soldados necesitan. Lo hemos probado con las M249 y M240B y pudimos demostrar que puedes quitar completamente el peso del arma de los brazos de los soldados", indica Baechle.
El ingeniero ha explicado que el proyecto todavía se encuentra en una fase temprana y que, aunque ha sido probado en situaciones de fuego real, quieren recopilar el máximo de referencias por parte de los soldados para terminar de ponerlo a punto y que se adapte a todos los entornos antes de que se pueda extender su uso en el Ejército.
"Vamos a llevar a cabo un estudio más amplio este año con más soldados para analizar la dinámica y los escenarios de disparo. Todavía estamos perfeccionando el dispositivo al tiempo que estamos buscando adaptar armas aún más pesadas", explica Beachle quien añade que ha recibido comentarios muy positivos por parte de los soldados y superiores ya que "se ajusta a la dirección que el Ejército quiere seguir en el futuro".