El jefe de gabinete interino de la Casa Blanca, Mick Mulvaney, ha reconocido este jueves que el presidente del país, Donald Trump, retuvo 391 millones de dólares (unos 351 millones de euros) en ayuda militar a Ucrania en parte para presionar a Kiev a que investigara una cuestionada teoría conspirativa sobre las elecciones presidenciales del 2016 en Estados Unidos.
Trump y funcionarios de su Gobierno negaron durante semanas haber exigido un 'quid pro quo' para entregar la ayuda, un tema clave dentro de una controversia que desencadenó una investigación para un juicio político contra el presidente republicano en la Cámara de Representantes.
Sin embargo, Mulvaney ha indicado en una rueda de prensa que la ayuda de Estados Unidos se retrasó en parte por las preocupaciones de Trump sobre un servidor informático del Comité Nacional Demócrata (CND).
En una llamada efectuada el 25 de julio, Trump le pidió al presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, "un favor" para investigar el servidor y otro asunto vinculado con los comicios de 2016.
Trump también solicitó a Zelenski que investigara al exvicepresidente Joe Biden y al hijo de éste, Hunter Biden, quien había sido parte del directorio de una compañía de energía ucraniana.
Durante la conversación, Zelenski se mostró de acuerdo en llevar a cabo la investigación solicitada por Trump. Posteriormente, Washington proporcionó la citada ayuda a Kiev.
En la rueda de prensa, un periodista ha trasladado a Mulvaney que lo que estaba describiendo era un 'quid pro quo'. "Hacemos eso todo el tiempo en política exterior", ha respondido.
El tema del servidor del CND se relaciona a una desacreditada teoría conspirativa que apunta a que Ucrania, y no Rusia, interfirió en las elecciones estadounidenses de 2016 y que un servidor informático del Partido Demócrata estaba en algún lugar de Ucrania.
Los comentarios de Mulvaney han llegado después de que el embajador de Estados Unidos ante la Unión Europea, Gordon Sondland, dijera en un testimonio escrito en el marco de investigación para un juicio político que Trump le pidió a altos funcionarios estadounidenses que hablaran directamente con su abogado personal, Rudy Giuliani, sobre la política exterior estadounidense.
En este sentido, señaló ante legisladores en la investigación liderada por los demócratas que no entendió "hasta mucho más tarde" que la agenda de Giuliani incluía medidas para que Ucrania investigara a Biden.