"Pendiente de resolución" estaba pasado el mediodía de ayer el rescate de Abengoa por parte de la Sepi, en palabras de la ministra portavoz, Isabel Rodríguez. "El órgano que lo tramita está informando su resolución. Las solicitudes se rigen por criterios técnicos", precisó Rodríguez en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, en la que dio cuenta de media docena de ayudas sí concedidas por valor de 721 millones de euros. La de Abengoa no estaba en la lista. En la práctica, es un no a la petición de 249 millones de euros de la multinacional sevillana, pues aunque Sepi resuelva ahora positivamente -algo en lo que ya prácticamente nadie confía- sería necesario otro Consejo de Ministros antes del día 30 para dar formalidad a la ayuda. Y no hay otro consejo antes del jueves.
Con esta opción pierde fuerza la operación para salvar la empresa a través del fondo americano Terramar, que partía de los 249 millones del rescate Sepi a las sociedades operativas de Abenewco1, 200 del fondo (que pasará a tener el 70% de Abeweco1) y 300 en avales.
Por el contrario, gana enteros la opción defendida por Clemente Fernández, presidente de Abengoa SA, de presentar un convenio al juez que lleva el concurso de la matriz antes del 1 de julio con importantes quitas a los acreedores. Se confía en conseguir avales e inyectar dinero nuevo con una ampliación de capital para mantener la empresa a flote. Los acreedores tendrían hasta el 30 de septiembre para adherirse al convenio. Se va a solicitar al juez una prórroga. La última opción es la liquidación.
El presidente de Abengoa ha señalado que hay que trabajar en una "nueva estructura para salvaguardar las unidades de negocio" y en vías alternativas de solución. Tendrá que haber preconcursos y concursos de acreedores para las diferentes sociedades.
Fernández ha explicado que los concursos serían para aquellas partes en que no hay actividad de negocio, mientras que las otras podrían ser preconcursadas, con lo que se ganaría para éstas cuatro meses de tiempo para buscarles una salida en ese tiempo.
Además, ha dicho que existen otras vías, además del Fondo de Solvencia, para que el Estado pueda apoyar a la viabilidad de Abengoa, donde ha recordado que es el segundo accionista, con un 3,152 % que tiene la Secretaria de Estado de Comercio.
Clemente Fernández ha dicho que el apoyo pueden ser avales a través de la compañía de reaseguramiento Cesce y ha afirmado que los "avales son la clave de la supervivencia".
En esta semana, se reunirá el consejo de administración de Abengoa S.A y también el de Abenewco, en el que están los tres consejeros que integran el consejo de Abengoa, según Fernández, que ha dicho que habrá que tomar decisiones.
"Un palo"
La negativa al rescate fue recibida ayer como "un palo" por los comités de empresa de Abengoa Agua, Abengoa Energía, Solúcar, Inabensa y Abenewco1 CPA, sociedades derivadas de Abengoa, aunque se agarran a las palabras de la ministra de que el expediente no está cerrado y, formalmente, no hay una negativa definitiva.
Los trabajadores de Abengoa, que ayer lunes se habían concentrado ante la delegación del Gobierno en Sevilla en demanda de una "solución", decían sentirse "abandonados" por el Ejecutivo, considerando que es "intolerable" que aún no haya decisión definitiva sobre su petición de rescate, lo que aumenta su sensación de "agonía".
El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz (PSOE), ignoró ayer que la Junta de Andalucía no tiene líneas para ayudar a empresas en crisis, y el Estado gestiona un fondo con 10.000 millones para ello del que va a dejar sin gastar más de la mitad, para pedir una "solución de última hora" que evite la liquidación de la multinacional sevillana Abengoa, solicitando a la administración andaluza" que se "implique un poquito más", tal y cómo él también pide a Madrid.