
El grupo industrial ThyssenKrupp recortará 1.500 empleos más en todo el mundo en los próximos tres años, que se suman a los 500 ya anunciados en tareas administrativas. l El gigante alemán huye del acero y apuesta por los ascensores
ThyssenKrupp informó hoy de que dos terceras partes del recorte de los puestos de trabajo en la división de construcción de grandes instalaciones y de buques, que es poco rentable, se realizará en Alemania.
La compañía alemana dice que existe una fuerte competencia y quiere reducir costes anuales hasta 200 millones de euros en los próximos tres años.
ThyssenKrupp quiere evitar despidos forzosos en esta división de soluciones industriales, que emplea a 21.000 personas en todo el mundo y que tuvo un beneficio operativo de 48 millones de euros en los tres primeros trimestres del ejercicio 2016/2017 (283 millones de euros un año antes)