La situación del fabricante de electrodomésticos Fagor se complica un poco más cada día que pasa. La empresa, que presentó el pasado miércoles preconcurso de acreedores con un pasivo de 1.110 millones, ha desatado el pánico entre los proveedores. Después de que se hayan dejado sin pagar varias facturas durante los últimos meses, el suministro se ha cortado, lo que ha obligado a la empresa a paralizar todas sus fábricas, 13 en todo el mundo.
Ayer, la cooperativa mantenía tan sólo abiertas la de Eskoriatza (ollas) y la de Bergara (de calentadores a gas), pero ambas han cerrado hoy. De esta manera, las cinco plantas en España (San Andrés, Garagarza, Basauri, Bergara y Eskoriatza, todas ellas en el País Vasco), las cuatro en Francia, una en Polonia, una en Marruecos y las dos de China quedan totalmente paralizadas.
En su informe semestral a la CNMV de junio pasado, la matriz del grupo de electrodomésticos reconocía que sólo tenía en plazo el 4% de sus pagos a proveedores y que su periodo medio de pago se prolongaba hasta los 96 días (más de tres meses).
Desde el próximo lunes, los 5.642 trabajadores del fabricante de electrodomésticos se quedarán así en la calle. En el caso de la plantilla de las plantas vascas, los contratados laborales por cuenta ajena pasarán a depender del servicio público de empleo (SEPE) y los cooperativistas de Lagun Aro EPSV. En las plantas internacionales los trabajadores pasarán a depender de sus respectivos servicios públicos de empleo, ya que éstos no son socios.
En principio, Fagor Electrodomésticos aseguraba que tenía liquidez para unas cuatro semanas y que podría pagar así las nóminas del mes de octubre, pero al quedar bloqueada la producción los plazos se acortarán, con lo que la compañía tiene ahora apenas unos días para resolver el problema financiero y evitar la quiebra definitiva y posible liquidación del grupo. Antes de acudir al Preconcurso en el Juzgado Mercantil Nº 1 de San Sebastián, Fagor hizo un intento desesperado de conseguir unos 120 millones para tener liquidez, solicitando sin éxito nuevas inyecciones de fondos a la Corporación Mondragón y al Gobierno vasco.
El Ejecutivo vasco dice que tiene las manos atadas para darle más fondos, pero emplaza a Mondragón a evitar a toda costa la liquidación de Fagor. Ahora todo apunta a que desde Euskadi se va a empezar a pedir apoyos al Gobierno central. Fagor se desprenderá de al menos ocho plantas y reducirá la plantilla a la mitad.
Miles de inversores atrapados
Además del drama de trabajadores y proveedores, en el preconcurso de Fagor hay otros perjudicados. Hay miles de pequeños inversores que tienen sus ahorros en las Aportaciones Financieras Subordinadas (AFS) que emitió la cooperativa en 2004 y 2006, por 185 millones. En caso de que Fagor se liquide serán los últimos acreedores a cobrar para recuperar su inversión.
Un nutrido grupo de estos inversores llevan un año movilizándose por lo que consideran que fueron estafados, con las "preferentes" de las cooperativas. Su comercialización se encuentra ahora en los tribunales y oganismo de consumo.