
ABB ha reducido más del 72% de sus emisiones de CO? entre 2020 y 2025, en todas sus plantas de España. Uno de los casos más destacados es el de la fábrica de ABB-Niessen de Oiartzun, que fue la primera del mundo en obtener la certificación de ecodiseño para su línea de productos ALBa y que, dentro de sólo unos meses, aspira a convertirse en una planta con emisiones netas cero.
Aprovechamos para hablar con su directora comercial, Ruth Solozábal, que cuenta con más de 24 años de experiencia en la compañía y comenzó dirigiendo la fábrica de Oiartzun, que acaba de celebrar 110 años historia, incluyendo sus inicios en Errenteria. Recientemente nombrada máxima responsable del negocio de Electrificación de ABB en España, lidera la estrategia de marketing y ventas para todo el país.
-Hace unas semanas se presentaba el programa Deskarboniza de Gobierno vasco y Diputaciones para ayudar a la descarbonización de todos los sectores. ¿Cómo reciben iniciativas como ésta desde ABB?
-Sin duda, todo lo que ayude a promocionar la descarbonización nos parece muy interesante. Desde ABB llevamos mucho tiempo trabajando en esa descarbonización y es nuestro leitmotiv. Nuestro propósito como empresa es conseguir un mundo más sostenible a través de la tecnología, y también más seguro.
Desde que empecé a investigar en el tema de la sostenibilidad uno de los datos que más me llamó la atención es que los edificios consumen el 40% de la energía y emiten un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial. Además, en España en concreto, el 82% de los servicios son energéticamente ineficientes.
Como Unión Europea tenemos unos hitos que cumplir, como el reducir esas emisiones a la mitad antes de 2030 y alcanzar las cero emisiones en 2050, entonces tenemos que coger velocidad porque hay mucho por hacer. Entonces que en el País Vasco haya estas propuestas desde la administración, para favorecer, animar y movilizar esas inversiones que nos den cierta velocidad, es una muy buena noticia.
-ABB-Niessen también trabaja en este área con el objetivo de reducir sus emisiones, ¿cómo lo están haciendo?
-Sí. Lo que hacemos en ABB es innovar, desarrollar tecnología, pero también aplicarla a nuestros propios edificios e industrias. Tenemos un proyecto muy bonito, 'Mission to Zero', con el que queremos conseguir que todas las fábricas de Niessen, las del negocio de Electrificación, lleguen a la neutralidad, pero no en 2050, sino en 2030.
Lo que hemos hecho ha sido empezar por nosotros mismos para aprender, hacer un testeo real de nuestras soluciones y así mostrar que es un camino que es real y que es posible y queremos invitar a nuestros clientes, que a su vez tengan clientes, que se preguntan cómo hacerlo o por dónde empezar.
En este momento ya son 20 las fábricas neutrales en ABB Niessen y la de Oiartzun, que también se ha unido al proyecto 'Mission to Zero', va a ser la número 21 dentro de sólo unos meses.
-¿Qué medidas están llevando a cabo en la planta de Oiartzun para conseguir este ambicioso objetivo?
-Estamos llevando a cabo una revisión completa. La mayor parte de los 4 millones de euros de inversión, en concreto 3,5 millones, los hemos destinado al tejado de la planta, de en torno a 6.500 metros cuadrados de superficie, donde hemos instalado placas solares con el objetivo de ser 'prosumidores', es decir, productores y consumidores, para llegar a la neutralidad cero.
Entre otras medidas, hemos revisado todo el circuito de calefacción para poner equipos más eficientes con bombas de calor y además hemos aprovechado los calores residuales de los procesos productivos y hemos revisado la infraestructura de vehículos eléctricos. También se han puesto cuadros eléctricos inteligentes para recuperar datos, monitorizar, tomar decisiones de forma autónoma, manual o automática, y hemos revisado el climatizador de las oficinas, hemos automatizado las luminarias y hemos puesto detectores de movimiento para reducir el consumo.
Todo esto no ha sido una transición de hoy para mañana, sino que la hemos hecho en dos años y pico, lo cual nos ha permitido ir reduciendo poco a poco el CO2 emitido. A día de hoy hemos reducido más de un 75% las emisiones de CO2, pero el objetivo es alcanzar las cero cero emisiones, por lo que cuando terminemos este proceso volveremos a tomar datos para corroborar que sea así.