Alcoa ha informado hoy a los trabajadores que ayer recibió una carta de un grupo que expresa interés en adquirir la fábrica de San Ciprián, pero sin hacer ninguna propuesta concreta. Por el momento se desconoce la identidad del mismo aunque se ha especulado ya con una alianza entre un fondo y un reconocido industrial del sector.
Según Alcoa, el posible comprador coincide con los problemas que tiene la planta de aluminio para su viabilidad; en particular en lo que se refiere al coste de la energía, pero no especifica cómo piensa resolver este problema, que es una de las causas principales de las importantes pérdidas en que está incurriendo. Pese a ello, el Gobierno ha planteado varias soluciones en este sentido a la compañía a lo largo de las reuniones que ha mantenido.
Alcoa, por su parte, reitera que está dispuesta a estudiar un proceso de venta de la planta de aluminio, siempre y cuando se proceda previamente a la parada ordenada de las cubas, ya que un proceso de ese tipo requiere tiempo para ejecutarse y su éxito es incierto pero los sindicatos consideran que una medida de este tipo llevaría a la planta al cierre por el nivel de inversión que se requeriría después para volverla a poner en operación.
Alcoa no contempla la venta de la refinería de San Ciprián, cuya propiedad entera no le pertenece.
La empresa estadounidense insiste en que la planta de aluminio está perdiendo más de 1 millón de euros a la semana y asegura que es necesario detener estas pérdidas con urgencia. Si las cubas se paran de manera ordenada, el coste de reiniciar las series de cubas de electrólisis sería considerablemente menor que las pérdidas sufridas por la planta en un año.
La empresa proseguirá con las negociaciones del periodo de consultas y no se tomará ninguna decisión hasta que se haya completado el proceso de consulta.