Las últimas encuestas muestran un profundo descontento con las políticas del presidente de la República de Francia, François Hollande. La población que aprueba las medidas emprendidas por el mandatario galo ha caído al 12%, el peor resultado de la historia para un presidente de Francia. Esta situación ha propiciado el auge Marine Le Pen y el Frente Nacional.
Los profesores de Economía Hans-Olaf Henkel (Universidad de Mannheim) y Brigitte Granville (Universidad de Londres), explican en Project Syndicate que "Francia podría afrontar una catástrofe, pues las acciones de Hollande podrían enfangar la economía en un estancamiento sostenido e incitar al electorado francés a elegir a Marine Le Pen como sucesor de Hollande".
Estos dos economistas consideran que Hollande debe cambiar radicalmente el sentido de sus políticas económicas. Y es que ahora mismo Francia sufre un 10,5% de paro, una tasa aún sostenible pero cuya tendencia sigue siendo al alza. En pocos meses ha pasado de ser el 10,1% al 10,5% actual.
"El problema del desempleo en Francia es consecuencia de unas monstruosas reglamentaciones laborales (el Código del Trabajo tiene 3.648 páginas) y, por encima de todo, de una carga fiscal asfixiantes impuesta al trabajo", explican Henkel y Granville.
Estos expertos aseguran que la presión fiscal ha aumentando en 40.000 millones de euros en los dos últimos años. Aún así, el secretario del Estado de Presupuestos, Christian Eckert, ha asegurado que no se pueden descartar más subidas de impuestos en el futuro.
Francia no ha emprendido ninguna política de ajustes similar a la de España. Con el nacimiento del euro, la posibilidad de devaluar el tipo de cambio para ganar competitividad se extinguió. La única vía para ganar competitividad en un corto espacio de tiempo es la 'devaluación interna', un camino que Francia no ha tomado. De este modo, el país galo tiene un déficit por cuenta corriente equivalente al 2% del PIB, mientras que Alemania goza de un superávit del 8%.
Esta situación es grave, tanto para Francia como para la eurozona: "La única solución es la unión política plena, que permitiría las transferencia fiscales desde los países más competitivos de la zona euro hasta sus homólogos más débiles", explican ambos economistas.
Mientras tanto, la impotencia de los grandes dos grandes partidos franceses para adoptar medidas vuelve inútiles sus promesas, lo que da mayor impulso a la candidatura de Marine Le Pen.
Récord de paro