En un informe publicado por la agencia de Estadística de la Comisión Europea, Eurostat, se confirma que las empresas españolas ocupan un puesto más que discreto en cuanto a innovación, concretamente se sitúan en la posición 23 de un ranking formado por 32 Estados, sólo el 41,5% de las empresas españolas realizaron actividades de innovación.
Los países que ocupan las posiciones punteras son Alemania, Luxemburgo, Bélgica, Portugal, Suecia e Irlanda. En todos estos Estados más del 60% de su tejido empresarial realizaron actividades relacionadas con la innovación. En Alemania, líder en este apartado, el 79% de las empresas declararon haber realizado actividades relacionadas con la innovación.
España se encuentra por detrás de países como Serbia, Turquía o Croacia. Los Estados que ocupan las posiciones más bajas dentro de esta clasificación son Bulgaria, Polonia, Rumania, Letonia y Hungría, todos ellos países del este de Europa, que se han incorporado recientemente a la Unión Europea y tienen un largo camino por delante.

La innovación implica la generación de una idea que puede afectar a la puesta en marcha de un nuevo producto, a los procesos de producción y comercialización, a la gestión de las personas, a las relaciones con otras empresas, entre otra gran variedad de aspectos que ayudan a mejorar el proceso productivo, ganar cuota de mercado, etc.
Este estudio realizado por Eurostat abarca estadísticas recogidas entre 2008 y 2010. Es un amplio trabajo que contiene un gran conjunto de indicadores sobre las actividades de innovación de las empresas y que pro primera vez informa sobre la creatividad empresarial.