
Sorpresa en el sistema de franquicias y en el sector de la hostelería española. El próximo mes de noviembre la dirección de Brasayleña, la cadena especializada en el rodizio brasileño, abrirá el primer establecimiento de Icona, una nueva marca con la que apuesta por la gastronomía italiana.
Según ha podido saber elEconomista Franquicias, el primer local de esa firma estará ubicado en la planta alta del centro comercial Nassica de Getafe, al sur de la Comunidad de Madrid.
Aunque la explotación de dicho local será responsabilidad directa de la matriz de Brasayleña -que también cuenta con un establecimiento en ese complejo comercial-, la marca nace con vocación de operar bajo el formato de la franquicia.
Eso sí, antes de abrir la cadena a potenciales franquiciados, Brasayleña quiere comprobar que los protocolos asignados a su nueva marca funcionan, tal y como explica a esta publicación Paz Serrano, directora de Franquicias y Expansión de Brasayleña.
De ahí que además del local de Getafe, los planes de Brasayleña, en cuya dirección general está Pedro López, pasen por abrir un segundo establecimiento propio para, si todo sale según lo previsto, empezar a franquiciar Icona unos seis meses después de la primera apertura, es decir, aproximadamente a mediados del año que viene, matiza Serrano.
Ahora bien, al igual que en Brasayleña, la estrategia empresarial de la cadena pasa porque la nueva marca se expanda tanto con locales propios como con franquiciados.
Levante y Andalucía, en el plan de expansión
Tanto con unos como con otros, la marca pretende implantarse en poblaciones grandes de la zona del Levante español, Andalucía, Madrid y Barcelona, y en locales a pie de calle y centros comerciales.
Aunque la ubicación exacta y el tipo de local condicionarán el coste de las franquicias de esta marca, Paz Serrano calcula que abrir una franquicia de Icona requerirá de una inversión próxima a los 400.000 euros para locales con unos 350 metros cuadrados de superficie.
Los candidatos que se quieran postular para entrar a esta nueva red deberán tener, según sostiene Serrano, un perfil muy similar a los de Brasayleña.
Teniendo en cuenta lo que el propio Pedro López explicaba a esta publicación en mayo, eso quiere decir que los franquiciados de Icona tendrán que tener un perfil más bien de empresario o de inversor. Y es que dada la cantidad requerida para sumarse a la marca, ésta no se antoja posible para candidatos con perfil de autoempleo.
De hecho, en los planes de Brasayleña también se contempla la opción de que franquiciados de la cadena del rodizio brasileño quieran abrir un local de Icona para que, lejos de convertirse en competidores de su negocio, puedan complementar su oferta.
Oferta gastronómica
Una oferta que será similar en cuanto al servicio en ambas cadenas. Igual que en Brasayleña se van haciendo pases por las mesas ofreciendo las distintas carnes del rodizio, en Icona el personal de sala irá ofreciendo a los comensales distintos tipos de pizzas al taglio, varios tipos de pasta, y otros productos típicos de la cocina italiana, como el provolone.
Según detalla Paz Serrano, la propuesta gastronómica de Icona constará de ocho pizzas artesanales diseñadas por el que ha sido el asesor gastronómico de Brasayleña para la puesta en marcha de la pata culinaria de Icona.
Se trata de Francisco Javier Rodríguez, pizzero y responsable de los restaurantes Francesco's Pizza -hay un local en la calle Fuencarral de Madrid y otro en Alcalá de Henares- y Ambigú -recomendado por la Guía Michelín-.
Además de esas pizzas, que se elaborarán en un horno a la vista de los clientes, el otro plato fuerte de Icona será la pasta. En concreto, la cadena ofrecerá una selección de cuatro tipos de pasta -cortas, largas o rellenas-, además de otros tantos platos típicos de la cocina italiana.
Ante esas propuestas, Serrano sostiene que el precio medio por consumidor en esta nueva cadena se situará entre los 13 y los 15 euros. "Icona es un concepto elevado en cuanto a producto e imagen, pero versátil para que puedan acceder a él distintos tipos de clientes", apostilla.
A falta de dos meses para que el primer local de esta cadena -de momento centrada en servir comidas, cenas, postres y helados- abra sus puertas, la directora de Franquicias y Expansión de Brasayleña asegura que el objetivo es que la nueva enseña capte la atención tanto de familias con niños, como de parejas o grupos de amigos o colegas de trabajo.
Además de su propuesta gastronómica, Icona ofrecerá a todos sus futuros clientes una decoración que según Serrano está inspirada en el "estilo mediterráneo con aires de la Toscana y elementos típicos de esa zona y de mediados del siglo XX, como lámparas, espejos o lonetas". Una decoración que ha corrido a cargo del equipo de diseñadores de la firma Madrid in Love.
Tal y como se aprecia en las fotografías de esta página y de las dos anteriores, esta decoración consta de colores que oscilan entre tonos pastel y blanco roto junto a otros más verdosos. "El interior de los locales de Icona tendrá elementos decorativos propios de ubicaciones exteriores como toldos, vegetación, suelo de barro... Hemos creado un ambiente exterior dentro de uno interior", explica.
La presencia de la vegetación en el interior de sus locales no es algo nuevo para Brasayleña, ya que en la remodelación de todos sus restaurantes la dirección de la cadena apostó por incluir un jardín vertical como el que se puede ver en el establecimiento que abrieron al lado de la Plaza Mayor de Madrid el pasado mes de mayo.
Con ese local a pie de calle, la cadena marcó un hito en su trayectoria, ya que hasta entonces todos sus establecimientos -12 propios y 11 franquicias en Galicia, País Vasco, Cataluña, Comunidad Valenciana, Valladolid, Málaga y Madrid- estaban ubicados en centros comerciales.
En la reciente entrevista que Pedro López concedió a esta revista el directivo también reconoció que en la cadena han detectado que gustan a los clientes extranjeros y que "los turistas valoran mucho nuestra relación calidad-precio". Por eso, al preguntarle si contemplaban la opción de salir de España, López contestó con un rotundo "por supuesto".
"Con el número de locales que tenemos, entendemos que la cadena puede desarrollarse mucho más en España. Pero no se nos olvida que en Europa estamos posicionados como la cadena número uno de rodizios. No existe otro establecimiento como Brasayleña. Hemos tenido propuestas, pero aún no hemos encontrado el proyecto que realmente pueda cumplir el desarrollo de varios establecimientos con un plan específico de crecimiento. Si sale un proyecto interesante y bonito con un masterfranquicia, le daremos todo nuestro apoyo, pero tenemos que encontrarnos con esa situación. Hasta ahora hemos tenido propuestas de locales sueltos", explicó.
A la hora de analizar cuáles serían los mercados prioritarios para ejecutar esa expansión fuera de España, López sostuvo que en esa lista se encontrarían principalmente países de Europa y el Norte de África, como Marruecos y Egipto, desde donde, según explicó, "ya nos han llamado. Ahora tenemos que retomar algunos proyectos, aunque no creo que la expansión internacional sea este año. En 2016 ya vamos bastante apretaditos", decía. La razón de aquellas palabras era precisamente el lanzamiento de la marca que hoy nos ocupa.