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Comida rápida y sana, un nicho de mercado para los emprendedores

  • Aumenta la preocupación por el cuidado de la salud y el bienestar
Imagen de Getty

"Una mente sana en un cuerpo sano". Los romanos ya sabían de la importancia de unir estos dos conceptos para llegar a alcanzar un bienestar pleno. Y así lo reflejó el autor Décimo Junio Juvenal, en uno de sus poemas satíricos. Pero, ¿cómo se ha ido desarrollando esta idea? Lo cierto es que, hoy en día, presentar un físico lo más cercano posible a los cánones de belleza de nuestra sociedad es una prioridad para muchos ciudadanos. Más noticias en la revista gratuita elEconomista Franquicias y Emprendedores

No importa la edad, el sexo o la ideología, lo cierto es que el culto al físico se ha convertido en un fenómeno cada vez más de masas. Pero por fortuna, a este hecho se le ha sumado el del concepto de salud. Tanto es así que, cada día parece que impera más la idea de que para cuidar el físico hay que hacerlo de la mano de ésta. "La gente está más concienciada con su salud.

En una encuesta sobre las preocupaciones de la población española realizada este año parece que el miedo a perder el trabajo, la vivienda o la pensión está disminuyendo, mientras que estamos viendo un aumento del cuidado de la propia salud y el bienestar, como una manera de sentirnos más seguros y más protegidos", defiende Alma Palau, presidenta del Consejo General de Dietistas-Nutricionistas de España (CGDNE).

La importancia del ambiente

Con estas premisas, ha surgido una nueva tendencia cada día más imparable: la moda del 'fast food' sano, un concepto que, a pesar de su traducción, no hace referencia a la comida rápida tal y como la conocemos. "Debemos partir de la premisa de que para comer sano es necesario hacerlo también con cierta calma y en un ambiente relajado y agradable", asegura Palau. Siguiendo esta línea, muchos emprendedores y empresarios han sabido ver este nicho de negocio y han decidido lanzar su nuevo proyecto en función de esta tendencia.

Y es que muchos de los datos recogidos en torno a la cuestión alimentaria comenzaban a ser preocupantes. Tanto es así que un estudio recientemente publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) calificaba los niveles de obesidad en Europa como "alarmantes" y llegaba a afirmar que si no se tomaban medidas "la próxima generación europea podría tener una esperanza de vida menor que la actual".

De esta forma, según el informe, un 59% de la población europea es obesa o tiene sobrepeso, sólo por detrás de América, nación con las tasas más altas del mundo. En muchas ocasiones, esta situación se ve favorecida por el escaso tiempo que la mayoría de trabajadores tienen para dedicar a la cocina o a la hora libre para comer, lo que lleva a muchos de ellos a no cuidar de forma adecuada su alimentación debido al estrés. Por eso, Palau defiende que "estos lugares tendrán éxito si logran evadir al comensal por un momento de sus preocupaciones, ofreciéndole una música suave, una iluminación cálida y unos espacios para comer cómodos y acogedores", y añade que "el estrés y la presión laboral provocan que comamos sin pensar en lo que estamos haciendo, y que elijamos un alimento u otro porque es más rápido de ingerir o de preparar y no porque es lo que realmente necesita nuestro cuerpo". Y es que, tal y como reconoce Palau, situaciones como el estrés podrían provocar inapetencia, con la consiguiente pérdida de peso, o bien ansidad, con un aumento de éste.

Comer en poco tiempo

Por otro lado, las estadísticas están de la parte de este tipo de establecimientos, ya que según la Federación de Usuarios Consumidores Independientes (FUCI) el 60% de los españoles nunca se lleva la comida de casa al trabajo y come en bares o restaurantes. Una actividad que supone un gasto medio de 257 euros mensuales. Así, cada vez más empleados salen a la calle para comer y lo hacen con el tiempo justo.

Una tendencia que conocen bien en Do Eat, una cadena de restaurantes de comida rápida y saludable que precisamente apuesta por ofrecer a sus usuarios un lugar para relajarse y desconectar. "Nuestros clientes vienen con el tiempo limitado", asegura Elene Khutsishvili, encargada de uno de los establecimientos, ubicado en la calle María de Molina de Madrid. "Apostamos por esta idea para innovar y diferenciarnos", afirma Elene, quien añade que el concepto do it your self está cada vez más en auge. "Tenemos una serie de bases preparadas y cada cliente puede ir añadiendo los productos que quiera".

Sobre si este concepto de comida sana se debe más a una moda temporal que a una preocupación realista por la salud, Khutsishvili reconoce que tiene mucho que ver con la moda: "cuando comencé a trabajar aquí hace un año, tenía que explicar a la gente cómo funcionaba el modelo. Sin embargo, ahora hemos pasado de tener cuatro o cinco bases para ensaladas a 20 o, incluso, 25".

Por otro lado, una de las reticencias que tradicionalmente ha frenado a posibles clientes de este tipo de establecimientos ha sido la idea de que por norma general "comer sano puede ser más caro". En cambio, desde restaurantes como Do Eat aseguran que una comida suele rondar los ocho euros.

Contar con profesionales cualificados

Si está pensando en lanzarse a emprender en este tipo de negocios, es fundamental que lo haga de la mano de profesionales. Para ello se recomienda contactar previamente con nutricionistas que puedan aportar un plan de alimentación fiable y contrastado, así lo aconsejan desde el CGDNE. Su presidenta añade además que "las opciones del menú deben ser, preferentemente, platos en crudo -ensaladas-, pastas o arroces ligeros -mejor integrales y sin salsas- carnes y pescados al horno o a la plancha, fruta preparada y fácil de comer, distintas opciones de legumbres y, por último, pan integral o de cereales". Del mismo modo, Palau defiende que siempre se debe elegir agua como primera elección de bebida.

Uno de los productos estrellas de este tipo de establecimientos son los zumos naturales o los batidos de vitaminas. "Los usan como una forma de reclamo y diferenciación y, efectivamente, les funciona", defiende Palau. Sin embargo, tal y como recuerda la presidenta del CGDNE, "el aporte extra de vitaminas o batidos hiperconcentrados de vitaminas, es más una cuestión psicológica que real", por lo que no hay que pensar que este tipo de bebida es la única solución para recuperar la energía perdida. "Es mejor reflexionar primero sobre nuestra alimentación, comer un poco menos y beber más agua de la que nos apetece", aconseja Palau.

Otro ejemplo de este nuevo concepto es la panadería Crustó, un espacio que también ofrece menús diarios. "En estos años el mercado ha ido creciendo, ya que los consumidores valoran más la calidad y el modo de fabricación. Prefieren consumir productos saludables y artesanos", reconocen desde Crustó, quienes añaden que todos los ingredientes son naturales: "seleccionamos las mejores materias primas. Así garantizamos que los estén libres de conservantes y aditivos".

Cafetería vintage

Desde la década de los 80 y los 90, proyectar un negocio hacia la imagen y el ambiente de los clásicos restaurantes estadounidenses era una opción de lo más rentable, quizá motivada por la atracción de lo novedoso y lo exótico. Así, al amparo de las nuevas tendencias consumistas y capitalistas, nacieron numerosos comercios de comida rápida, donde la hamburguesa era el actor protagonista.

Sin embargo, a día de hoy, esa imagen se encuentra ya demasiado explotada en nuestra retina. Actualmente en nuestra sociedad imperan, y cada vez más, nuevos conceptos relacionados especialmente con una imagen más elitista y alejada de la idea de masas, al que hacían referencia los establecimientos de comida rápida tradicionales. De esta forma, las cafeterías de ambiente vintage se han convertido en los espacios principales de este tipo de alimentación. Así, en muchas de ellas podemos encontrar productos para veganos o vegetarianos, completamente naturales. Barrios como el madrileño Malasaña esconde muchos de estos espacios entre sus estrechas callejuelas, como el restaurante Magasand.

Todavía es pronto para augurar si este tipo de comercios permanecerán en el tiempo, pero de lo que no cabe duda es de que con su ejemplo, pueden llegar a cambiar las tendencias de la sociedad. No obstante, nunca hay que olvidar la importancia de acompañar la alimentación sana con una actividad física moderada, un menor nivel de estrés, y una ausencia de hábitos tóxicos como son el alcohol y el tabaco.

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Comentarios 1

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Mike Magana
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Muy buen artículo, el hecho de que la dinámica actual nos ha llevado a alimentarnos con comida rápida, no quiere decir que no podamos comer saludablemente. Hay que saber cómo alimentarnos, al respecto, comparto información que considero valiosa, espero sea de utilidad...http://tinyurl.com/qh5sxl8

Puntuación 2
#1