
En el trabajo, las tareas administrativas con bajo valor añadido son frustrantes. ¿Quién se alegra de pasar el final de la tarde del viernes procesando informes de sus gastos en un antiguo archivo de Excel?
Para solucionar esta problemática nació Rydoo, una aplicación que cuenta actualmente con 6.500 clientes, en 60 países, y medio millón de usuarios, que utilizan la aplicación desde su móvil, como una solución para agilizar el control de gastos, además de eliminar el papel, que es uno de los puntos más reclamados por los clientes.
Andrés Reyes es el territory manager para España y Latinoamérica de la compañía, mientras que Xavi Sáez es el sales manager en España.
¿Cómo nace Rydoo?
En 2011 nace la aplicación, inicialmente una solución de pagos para empleados. Pero en 2013 se convierte: aparece una compañía en Bélgica que sugiere crear una plataforma para la gestión de gastos. Se desarrolla esa plataforma, comienza a comercializarse, y adquiere más fuerza que la solución inicial. A partir de ahí, se le da un nombre, y se consolida como una spin-off de Expenditure, que es como se conocía la solución inicial.
Posteriormente, en 2017, se producen dos hechos clave para la compañía: por un lado, la plataforma logra la homologación de la Agencia Tributaria, que nos permite dar un servicio completamente digital en España; y por otro lado, es adquirida por Sodexo, lo que significa dejar de lado el camino habitual de las startups -buscar fondos y levantar rondas de financiación- e incorporarse al portfolio de la familia Sodexo. Está incorporación permite construir una solución de principio a fin de viajes de negocios. Tanto el componente de gestión de gastos, como los viajes.
Finalmente, en junio de 2018 lanzamos Rydoo, la nueva marca. Se trata de una corp-up, que no es ni una startup ni una gran empresa, sino que une lo mejor de los dos universos. Y un año después, llegamos a España.
¿Qué papel juega Sodexo?
Aunque adquiere Rydoo, se mantiene como una empresa autónoma dentro del grupo, con poder de decisión propia. Hay sinergias con la matriz, con las que puede compartir portfolio o oportunidades de negocio, pero es independiente.
¿Cómo funciona la aplicación? ¿Es sencilla de utilizar o requiere un proceso de formación?
Nuestra herramienta es muy fácil de utilizar y no requiere de formación específica. El usuario se descarga la aplicación en su móvil. Desde ahí le hace una foto al recibo, la factura o el justificante. Y no hace falta nada más. La plataforma analiza la información, captura el nombre del trabajador, la fecha, el importe y la moneda utilizada. Una vez completada la captura, solo hace falta señalar la categoría a la que pertenece: transporte, comida, material de oficina... Las compañías son las que ponen límites. Las hay que son más flexibles, y las hay más restrictivas, que ponen un límite de gasto.
¿Cuál es el perfil de cliente? ¿Cómo se llega hasta ellos?
Aunque la aplicación es adaptable a todo tipo de empresas, e incluso los autónomos pueden trabajar con nosotros, las compañías que más partido le pueden sacar son las que cuentan con muchos empleados haciendo gastos, y que además tienen una preocupación por la satisfacción de sus trabajadores, quieren mejorar su experiencia y recortar los tiempos de reembolso. Y eso pasa en cualquier empresa.
Cada vez es más habitual la factura digital, ¿es una amenaza para el modelo de negocio?
Es verdad que cada vez hay más tickets digitales, pero nuestra aplicación ya está preparada para esta nueva realidad. Por ejemplo, hoy al dejar el hotel nos querían dar la factura en formato DIN A4, que es muy incómodo, no sabes ni dónde guardarlo. Entonces he pedido que mejor me la enviasen por correo electrónico, y a través de la aplicación, he creado automáticamente una línea de gasto. Esa digitalización es un beneficio para todos.
¿Cómo ha sido la llegada a España? ¿La aplicación ha tenido una buena acogida?
Hemos crecido un 330% en el último año. Esperemos que siga así en el futuro. Tenemos muy buenas perspectivas para los próximos meses.
¿Quién paga por la aplicación? ¿La empresa o el trabajador?
La herramienta la paga la empresa. El empleado es el que hace uso, pero es la compañía la que paga por esos beneficios: ahorro de tiempo, mayor visibilidad, mayor control del gasto... e incluso por ahorro de dinero. Por un lado, por el coste de oportunidad, ya que es mejor tener a un comercial buscando nuevas ventas que teniéndolo una hora y media rellenando una hoja de cálculo; y por otro, porque contamos con un partner que ayuda a las empresas a recuperar el IVA.
¿Cuál es la principal competencia de su aplicación?
Nuestra competencia sigue siendo el Excel y el papel. El 80% de las empresas sigue utilizando este formato analógico. Nuestro reto es hacerles ver los beneficios de contar con nuestra aplicación.