El remedio casero para suavizar las varices y reducir la inflamación en las piernas de forma natural
¿Por qué me salen varices?
  1. Fuente: Istock

1. ¿Por qué me salen varices?

Las varices, también conocidas como venas varicosas, son dilataciones venosas, generalmente hinchadas y retorcidas, que se caracterizan por la incapacidad de establecer un retorno eficaz de la sangre al corazón. Como resultado, la sangre se acumula en ciertos puntos, provocando hinchazón y sensación de pesadez. 

Por lo general, estas aparecen en las extremidades inferiores, las piernas. Según el Clínic de Barcelona, se trata de una afección es muy común en mujeres, ya sea durante el embarazo, y personas mayores, aunque también entra en juego el factor hereditario. 

El trio natural que mejora la circulación
  1. Fuente: Istock

2. El trio natural que mejora la circulación

Afortunadamente, existen remedios naturales para poder reducir las varices y mejorar la circulación de nuestras piernas. El romero, el laurel y el aceite forman el trio perfecto para ello, gracias a sus beneficios para la salud vascular y la piel. 

De este, sobre todo destaca el romero, ya que esta planta es rica en antioxidantes y compuestos antiinflamatorios, lo que ayuda a prevenir la formación varices y disminuye su apariencia. 

Cómo prepararlo
  1. Fuente: Istock

3. Cómo prepararlo

Ingredientes: 

  • 5 ramitas de romero 
  • 10 hojas de laurel 
  • 200 ml de aceite de oliva virgen extra 

Lo primero que debes hacer es lavar con cuidado las ramas de romero y separar sus hojas. Tras ello, tritura las hojas de laurel y en un frasco hermético, añade ambas plantas junto con el aceite de oliva. 

A continuación, envuelve correctamente el frasco en una toalla y colócalo durante 30 minutos dentro de una olla con agua caliente para que las plantas liberen sus principios activos. 

Déjalo reposar durante 10 días en un lugar fresco y oscuro, y después aplica en las piernas con masajes suaves. 

A tener en cuenta
  1. Fuente: Istock

4. A tener en cuenta

Por supuesto, aunque se puede hacer uso de remedios naturales para combatir esta afección, es importante recordar y tener en cuenta que podría no ser suficiente.

Los tratamientos caseros no sustituyen a la medicina natural, por lo que ante todo, y si los síntomas persisten o empeoran, se debe acudir al médico para obtener un diagnóstico personalizado y un tratamiento adecuado. 


Más galerías