Poner tu móvil a salvo de un ciberataque es tan sencillo como hacer estos cambios y hábitos que solo te llevarán unos segundos
Tener el Bluetooth siempre encendido

1. Tener el Bluetooth siempre encendido

La gran mayoría de personas siempre llevan el Bluetooth encendido por comodidad, pero con esta práctica estamos dejando la puerta a abierta a que alguien se conecte a nuestro dispositivo y pueda iniciar una serie de ataques.

Conectarse a WiFis públicas sin VPN

2. Conectarse a WiFis públicas sin VPN

Las redes públicas pueden no ser lo que parecen, y es que detrás de lo que parece el WiFi de un bar o del aeropuerto, puede que haya una red de un ciberdelincuente que en cuanto te conectes podrá robarte fácilmente. Siempre que tengamos que usar WiFis públicas es indispensable usar una VPN para estar protegidos.

Enlaces sospechosos

3. Enlaces sospechosos

La curiosidad mató al gato, y clicar sobre enlaces que son sospechosos nos puede salir muy caro. Por eso si nos llega o nos cruzamos con un link que tiene algo raro o nos hace dudar aunque sea un segundo, es mejor ignorarlo.

Ignorar actualizaciones

4. Ignorar actualizaciones

Las actualizaciones son necesarias para tu dispositivo, y una de las principales razones de ello es porque incluyen novedades de seguridad o parches que arreglan vulnerabilidades, ignorarlas no es nada recomendable.

Descargas desde fuentes no oficiales

5. Descargas desde fuentes no oficiales

Ya sea una app, imagen, vídeo o lo que se te ocurra, siempre debemos acudir a las fuentes oficiales y fiables para realizar descargas.

Notificaciones en la pantalla de bloqueo

6. Notificaciones en la pantalla de bloqueo

Puede que sea cómodo para saber qué te dicen sin tener que desbloquear el móvil, pero al mismo tiempo también estás exponiendo mucha información que puede ser sensible a cualquier persona que tenga tu móvil entre sus manos.


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