El padre de Neymar está en Barcelona. Falsa alarma. El también agente del brasileño no se encuentra en la ciudad condal para frenar la salida de su hijo rumbo al París Saint-Germain (PSG), sino por un motivo mucho más suculento: cobrar 26 millones del Barça en concepto de... ¡prima de renovación!
Sí, han leído bien: prima de renovación. La historia es compleja y aunque suene sorprendente, tiene su lógica. Resulta que cuando Neymar renovó por el Barça hace un año, el progenitor del futbolista se aseguró que él también sacaría un beneficio económico de este movimiento y firmó percibir una prima de renovación suculenta. En total, y como ha trascendido ahora, 26 millones de euros.
Neymar padre reclamó, informa Marca, 40 a plazos, pero el acabó aceptando que fueran 26 de una tacada que deberían abonarse el 31 de julio de 2017, esto es, ayer. Y a eso fue el padre de Neymar a Barcelona. A cobrar lo que le correspondía por esperpéntico que pueda sonar que lo haga a unas horas de que su hijo se marche al PSG.
El Barça, harto ya de este tipo de juegos, decidió depositar la cantidad en un notario a la espera de que se resuelva la salida del jugador al PSG. Si se concreta (que se concretará), el club se negará a abonar esa prima de renovación al entender que, de facto, Neymar padre está incumpliendo, que no existe renovación alguna que abonar porque el muchacho se irá sólo un año después de firmar su ampliación de contrato.
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