El Real Madrid sigue en su cada vez más habitual crisis de juego. Los blancos acumulan problemas futbolísticos, tanto en defensa como en ataque, y se busca culpables. Esta labor de señalización se vuelve hacia los jugadores, pero el entrenador blanco añade matices, como el de la confección de la plantilla. Y pone el acento sobre Toni Kroos.
Según El País, Zinedine Zidane incide en la poca coherencia táctica del fichaje del jugador alemán, que colocado en el centro del campo no puede cumplir con las labores de pivote y deja al equipo sin un mediocentro de contención clásico. Fue realmente significativo que quedase fuera de la convocatoria ante Las Palmas. Eso sí, el resultado fue similar al de otras ocasiones: el Real Madrid sigue con un problema serio de juego y de defensa y control.
Todo radica en que con el fichaje de Kroos, se desatendió la faceta defensiva del equipo, y se utilizó al '8' como lo que no era, un mediocentro de amplio recorrido. Pese a momentos de brillantez como los meses finales de 2014, no ha habido una continuidad en la eficacia del conjunto madridista.
Frente a esta situación, Ancelotti pidió un refuerzo que no llegó. Rafa Benítez también se percató de la problemática, y pidio a un hombre con más recursos técnicos que Casemiro, pero el resultado fue que solo el brasileño llegó al club. Zidane ha aterrizado en Concha Espina y también ha llamado la atención a la directiva sobre ello.
Lo cierto es que el Real Madrid manejó una lista de posibles candidatos después de que los miembros de la secretaría técnica avalasen la opinión de Ancelotti. Entre ellos se encontraba Kanté, pivote que sostiene la revolución del Leicester en la Premier. Al final, se optó por no fichar.
Con la Champions aún en juego, el Real Madrid sigue sufriendo. Es de esperar que Kroos regrese a la titularidad después de ese descanso que tanto extrañó a propios y a extraños. Zidane sigue intentando encontrar el equilibrio sabiendo que cuenta con un hándicap de serie.
Un nuevo problema