El Real Madrid de Zidane volvió este domingo al Santiago Bernábeu y lo hizo con una única duda en su once. ¿James o Isco? ¿Isco o James? El pálpito general del madridismo creía que existiría una alternancia entre ambos para, así, apaciguar cualquier conato de malestar entre dos de los hombres llamados a ser referencia en el futuro del equipo merengue. Es decir, que jugaría James. Pero no fue así. Zidane volvió a apostar por Isco y dejó a James en el un banquillo en el que sacó de sus casillas a su técnico.
Lo hizo con dos gestos. Uno fue captados por las cámaras. Sucedió cuando, tras el descanso, Bale se quedó en el vestuario aquejado de molestias en el soleo. James y Jesé calentaron durante el entretiempo como posibles sustitutos. Finalmente fue el español en encargado de saltar al terreno de juego.
James, visto que su compañero iba a suplirle, se marchó al banquillo y se sentó en la segunda fila. Apenas arrancado el partido, Zidane se dio cuenta de que el '10' no estaba en la banda, continuando con los ejercicios de calentamiento, sino sentado a unos metros de él. Se dio la vuelta, le reprendió su presencia en el banquillo y le pidió salir a calentar. 'Zizou' extendió los brazos en gesto de incomprensión por la presencia del colombiano en el banco.
Era el segundo tirón de orejas que le daba en la tarde. Porque el otro gesto por el que James sacó de sus casillas al técnico galo aconteció antes incluso de que comenzara el partido, cuando en el calentamiento de la plantilla, los suplentes se pusieron a hacer un rondo junto a la zona técnica del Real Madrid.
Kiko Casilla, Jesé, Danilo, Casemiro... todos estaban allí. Todos menos James. El colombiano 'pasó' de estar en el ejercicio hasta que Zidane lo vio y ordenó que se metiera con el resto de sus compañeros. James tuvo que dejar atrás su presumible malestar por ser suplente para convertirse en uno más y acompañar a los que no iban a jugar de inicio.
Dos guiños que dejan entrever que el colombino no está del todo satisfecho con la manera como ha iniciado Zidane esta nueva etapa en el banquillo. Pese a ello, en ambos casos no dedicó ni un mal gesto a un técnico al que reconoce que admiró como jugador y que, ahora que tiene a su lado en el banquillo, parece que no le replicará o reprochará estas pequeñas broncas que, con Rafa Benítez, siempre tenían respuesta en forma de 'caras largas' por parte del mediapunta colombiano. Es más, cuando James se disponía a saltar al campo en lugar de Isco, 'Zizou' le dedicó unas palabras de apoyo en la banda.
Bronca en el banquillo