
Unos pocos días después del 'dardo' de Gerard Piqué a Álvaro Arbeloa (llamándole "cono"), el revuelo mediático va a tener continuación. El central hablará en rueda de prensa, antes del entrenamiento previo a las semifinales del Mundial de clubes. El anuncio ha generado expetación.
Una comparecencia de Piqué, promete, ante todo, la expulsión de lo políticamente correcto. En este sentido, no se prevé una disculpa grandilocuente. No es el '3' hombre de medias tintas, y tampoco una persona que renuncie a su particular de concebir las rivalidades.
Con el telón de fondo de la polémica con Arbeloa (todo inició con el 'tuit' del blaugrana riéndose del Real Madrid por la alineación indebida de Cheryshev ante el Cádiz), el defensa será el protagonista, aunque su presencia ante los medios tiene un trasfondo oculto.
Según As, la presencia de Piqué esta semana ante los medios solo responde a la casualidad. Justamente esta semana, le ha tocado hablar al zaguero porque llegaba su turno de comparencencia. Todo se debe a un sorteo en el que se va determinando el orden de las ruedas de prensa, y la suerte ha querido que sea él este miércoles.
Al percatarse los miembros del departamento de comunicación del Barcelona de la circunstancia, preguntaron al jugador si tenía algún inconveniente en dar la cara. Piqué respondió que no, y por esta razón tendremos una rueda de prensa con mucho morbo.