Rafa Benítez ha implantado un nuevo sistema en el Real Madrid, concretamente, en la zona de ataque. El técnico ha recolocado a Gareth Bale, pero a la vez ha concedido a los cuatro jugadores (tres mediapuntas y delantero) una libertad que ha cambiado la forma de poblar el campo rival.
Cuenta El País que la libertad de movimientos que ahora tienen los jugadores más ofensivos del equipo (a través de permutas por todo el campo, intercambiando roles y espacios en el césped) confundió al plantel blanco cuando comenzó a ejecutar las nuevas directrices.
La idea de Benítez era tratar de crear confusión en el equipo rival, no crear facilidades en las marcas a los defensas rivales y habilitar espacios para que otros jugadores, partiendo desde posiciones diferentes, los aprovechasen. El proceso de entendimiento está siendo largo. Contra Betis y Espanyol ha habido goles (y muchos), pero quedan las grandes pruebas ante rivales de enjundia. Ahí se verá si el equipo ha asimilado los conceptos, que obligan a un trabajo intenso y cuidadoso. Aspectos, por otra parte, en los que Benítez es experto.
La reacción de los jugadores fue de clara suspicacia. Pensaban los miembros de la plantilla que esta forma de dibujar la plantilla en su zona de ataque respondía a la necesidad de salvar a Gareth Bale de otro año en el ostracismo de la banda derecha. Ante la negativa de Cristiano a ser un '9', tuvo que pensar en cómo dar importancia al galés.
En el centro de la línea de mediapuntas, ha conseguido tener más presencia, pero sus aptitudes técnicas son más limitadas que las de jugadores como Benzema o James. Por esta razón, la movilidad de los miembros del ataque le ha favorecido. Doblete ante el Betis y doblete de asistencias contra el Espanyol.
Este método es nuevo en Benítez, porque el problema también es nuevo para él. Su entorno ya lo avisó, y con los primeros problemas para hacer gol en pretemporada surgieron las dudas. Benítez seguirá insistiendo, puesto que en este momento es la opción más viable y cuenta con el apoyo de los últimos resultados.
No obstante, ya dejó la puerta abierta a otro tipo de vía para juntar piezas en el ataque, asegurando que ni la 'BBC' ni el lugar de partida de cada uno de los miembros eran innegociables. Mientras Benítez continúa con las probaturas, los jugadores tratan de despejarse el despiste de encima.
Entidades
Un caos ordenado