Fútbol

Pulso a cuatro bandas por los roles de Cristiano y Bale en el Real Madrid

Cristiano y Bale, en El Molinón. Imagen: EFE.

Florentino Pérez pasó por los micrófonos de Cope para hablar de la actualidad del Real Madrid en diversos frentes. Uno de ellos, naturalmente, fue Gareth Bale. La nueva incursión del futbolista galés en el centro de la mediapunta está dando mucho que hablar, y las palabras del presidente fueron relevantes.

"En mi época los que eran zurdos jugaban por la izquierda. Pero yo no me meto", respondió Pérez cuando se le inquirió por la nueva posición de Bale. La primera parte de la frase se aleja de cualquier apoyo a esta nueva demarcación del '11', más cuando a comienzos de verano se fantaseaba con la colocación del jugador en la izquierda y el paso de Cristiano a la delantera pura y dura.

Se dibuja de esta forma un curioso panorama para con el de Cardiff. El futbolista comunicó a su entrenador que quería jugar detrás del punta, y Benítez aceptó. El resultado ha sido un Bale mucho más presente, pero el daño colateral ha sido, en este caso, inmenso: la desaparición de Cristiano Ronaldo, peleado a todas luces con el gol.

En paralelo, se encuentra la siempre poderosa opinión de la directiva blanca, reflejada ayer por Florentino Pérez. Lo cierto es que Benítez ya dio a entender hace un par de semanas que las posiciones de la 'BBC' (y de hecho, el propio trío atacante) no eran, ni mucho menos, innegociables.

En este momento, la opinión de Florentino encaja con la de Benítez (que aunque aceptó la petición de Bale, tenía pensado alinearle en la izquierda y centrar a Cristiano en la punta del ataque) y es opuesta a la de los jugadores, que desean jugar en sus demarcaciones habituales.

Bale parte en la actualidad desde el centro, y ha aumentado su compromiso en materia ofensiva, ofreciéndose mucho más y cambiando el aislamiento de la banda derecha por mucha más participación. Se le percibe un hándicap en las combinaciones, pero el rendimiento goleador (también en Gales) da razones a los que defienden su nueva posición.

En lo que respecta a Cristiano, a pesar de que está tardando en acostumbrarse a las nuevas limitaciones del sistema de Benítez, está donde quiere estar. El luso vive del gol, y en cuanto consiga ver puerta, terminarán los problemas. Ha tenido ocasiones, y a la solución al problema de espacios en ataque se le presupone solo tiempo.

En este cruce de pareceres, todo indica que a corto plazo no habrá cambios en el ataque del Real Madrid. Ante el Espanyol, y con la baja de James (entrará Isco, obedeciendo a la lógica) las posiciones serán las mismas que contra el Betis. Una mala actuación podría provocar cambios.

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