El delantero del París Saint Germain, Zlatan Ibrahimovic, ha revelado este miércoles los detalles de su salida del FC Barcelona, después de un breve periplo en la entidad azulgrana en el que terminó enfrentado con todos los pesos pesados del club, destacando el entonces técnico Pep Guardiola.
El ariete sueco explicó la presión que hizo, junto a su agente Mino Raiola, en el despacho presidencial entonces ocupado por Sandro Rosell.
Su argumento principal era el deseo de salir con destino al Real Madrid, si bien luego se desveló que únicamente se trataba de una estrategia para facilitar su marcha.
El Barcelona era consciente de que dejarle salir era obligatorio por su mala relación con el técnico, pero la reacción fue de gran sorpresa cuando Ibrahimovic pidió marcharse al eterno rival.
"¿A qué equipo quieres ir?", preguntó Rosell, antes de que 'Ibra respondiera que "al Real Madrid". "No es posible. Cualquier opción menos esa", espetó el máximo mandatario, según la conversación desvelada en la autobiografía del futbolista, 'I am Zlatan Ibrahimovic'.
El sueco relata la actitud del presidente. "Estaba temblando. Mino y yo lo tuvimos muy claro. Estábamos jugando nuestro partido y yo estaba muy calmado", aclara, antes de reconocer que en realidad su voluntad no era ir al equipo blanco y que todo se trataba de una estratagema.
"Me has hecho una pregunta y te doy una respuesta. El Real Madrid es el único equipo en el que me veo jugando. Me gusta Mourinho, pero tenéis que llamarles y decírselo a ellos", presionó el futbolista.
Ante esta respuesta, el club empezó a buscarle otro posible destino y ahí apareció el Milan, verdadero objetivo de Ibrahimovic. La entidad 'rossonera' negoció muy a la baja, y pese a que "empezaron pidiendo cincuenta millones de libras (...) finalmente fui vendido por veinte millones de euros". "Gracias a una sola persona, mi precio inicial había caído y yo podía irme al Milan, que es lo que quería", concluye.
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