James Rodríguez, futbolista colombiano del Real Madrid, ha protagonizado una especie de 'milagro' después de haberse recuperado de su lesión (rotura del quinto metatarsiano) en un tiempo récord. El '10' sólo ha necesitado dos meses para estar a tope cuando, habitualmente se necesitan tres para volver a entrenar y unos 15 días para jugar a ritmo normal. ¿Cuál es el origen de este éxito?
Cuenta el diario Marca que tres han sido los factores clave. El primero, la clínica murciana donde le operaron. Con el doctor Mariano de Prado al frente, le aplicaron una técnica revolucionaria en este tipo de lesiones. Su éxito fue notable y adelantó los plazos.
El segundo factor relevante ha sido el trabajo de recuperación de los responsables de preparación física del equipo, que no sólo le han permitido sanar bien de su problema, sino mantener, al mismo tiempo, el estado físico del futbolista. En semana y media de vuelta al grupo, James ha estado en condiciones para ser titular y brillar como brilló ante el Granada.
Por último hay que señalar la ambición del jugador, que se marcó como plazo estar para el clásico del 22 de marzo. No llegó a tiempo, pero a cambio, acortó por ese deseo el periodo que necesitó para estar listo.
Sólo un lunar le señaló en estos dos meses: su presencia en la fiesta de Cristiano Ronaldo cuando apenas hacía unos cuantos días que se había producido su dolencia.
El jugador ya explicó este sábado que durante la fiesta había permanecido sentado y que sólo había acudido para acompañar a Cristiano. Visto lo visto, no parece que aquella presencia perjudicara demasiado su vuelta a los terrenos de juego.
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Un debate incómodo