
El Clásico significará el regreso de la pareja preferida de Carlo Ancelotti en la medular del Real Madrid. Luka Modric y Toni Kroos volverán a compartir titularidad después de nada más y nada menos que 134 días. Tres meses y medio en los que el centro del campo del equipo ha sufrido muchos vaivenes.
Desde la lesión del croata, el 16 de noviembre, la medular blanca ha sido de circunstancias. Isco entró en su lugar, pero el equipo acabó perdiendo fuelle y Toni Kroos dejó de tener capacidad para abarcar toda la zona en este comienzo de 2015. La lesión de James complicó más el panorama.
Tanto Illarra como Khedira o Lucas Silva no han cumplido como se esperaba (a pesar de momentos concretos como el partido del brasileño en campo del Schalke) y la llegada de Modric se antojaba fundamental. El equipo lo notó, pero contra el Levante se dio descanso a Kroos. Tal y como recoge As, después de 134 días el Real Madrid vuelve a tener a su pareja clave.
Lo cierto es que la posición que quedaría teóricamente libre en los tres de la medular estaría bien cubierta: al margen de estados de forma, Isco y James han sabido cumplir con ese doble carácter defensivo y ofensivo, escudados por Kroos y Modric. Ahora bien, sin uno de estos dos, han ido bajando el rendimiento (el colombiano, hasta el momento de su lesión).
Hasta que Modric no se ha recuperado del todo, no se ha podido decir que la línea de centrocampistas ha sido la preferida por Ancelotti. Su impacto fue notable: con Kroos y Modric el porcentaje de victorias fue del 80%, sin la pareja completa bajó hasta el 72%.
Mientras que el alemán ha disputado un 86,6% de los minutos posibles, el croata jugó el 87% de los minutos totales hasta el momento de su lesión. Más de cuatro meses después, Ancelotti pone fin a su separación forzosa.