Montero asegura que las alzas fiscales no tendrán ningún impacto sobre la pequeña y mediana empresa, y que una de cada cuatro de ellas verán rebajado su tipo efectivo de sociedades.
En su despedida, reitera que se construye un país legitimando sus servicios y pide: "Señorías, intentemos llegar a acuerdos. No puede haber excusas para que encima de todo no prevalezca el bien común". Cerrada ovación de los socialistas al final de su intervención, tras la que la ministra se besa con Pedro Sánchez y Carmen Calvo.
