El regulador financiero austriaco, FMA, ha asumido el control de Bank Medici después de que la entidad financiera con sede en Viena haya declarado unas pérdidas de 2.100 millones de dólares por su exposición a Madoff.
Con su intervención, la institución quiere "salvaguardar los intereses de los acreedores y los activos de las compañías", según informó en un comunicado.
La medida fue avanzada el pasado 31 de diciembre.