Deutsche Bank acaba de publicar un informe en el que advierte que el mercado inmobiliario es uno de los más caros de todo el mundo e indica además que, "aunque se pudiera evitar un crash, un enfriamiento parece inevitable, más tarde o más temprano". La autora del informe, Susana García-Cervero, asegura que esto afectaría de forma muy amplia a varios sectores económicos. Las compañías constructoras se verían muy afectadas, al igual que los bancos, que verían cómo aumenta la morosidad, y además la administración, especialmente la local, tendría problemas financieros y podría sufrir bajadas en los ratings crediticios.