La economía estadounidense destruyó 84.000 empleos en agosto, según acaba de comunicar el Departamento de Trabajo. El consenso de analistas recopilado por Bloomberg esperaba que se registrasen 75.000 empleos menos.
En tanto, la tasa de paro subió hasta el 6,1% desde el 5,7% del mes anterior, cuando se esperaba una tasa sin cambios.
Además, la cifra de destrucción de puestos de trabajo de julio se revisa al alza: 60.000 frente a los 51.000 anunciados.
