El vicepresidente económico y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, manifestó su preocupación acerca de que el plan de viabilidad de Spanair no afecte a la competitividad del sistema de transporte, sobre todo en las zonas donde la actividad de la aerolínea es destacada.
Según indicó, la inquietud del Ejecutivo se centra en el mantenimiento del servicio y en cómo los trabajadores pueden verse afectados por la regulación.
<b>"Lógicamente, la pérdida de una empresa debe ser considerada de forma negativa"</b>, añadió Solbes en referencia a los cerca de 1.100 trabajadores de los que la compañía va a prescindir para hacer frente al aumento del coste de carburantes y a la bajada de demanda actual.