El presidente de EEUU, Barack Obama, no ha vivido últimamente su mejor momento. Los niveles de desaprobación del mandatario se han disparado hasta el 60 por ciento según una encuesta publicada por Associated Press.
Un hecho que ha provocado el distanciamiento de muchos candidatos demócratas, como Michelle Nunn, que intenta hacerse con un escaño en el Senado por Georgia o Kay Hagan, en situación similar en el estado de Carolina del Norte. Obama es consciente de esta situación y parece no guardar rencor. Al ser preguntado por este asunto la semana pasada, el presidente dejó claro que no se siente "herido".
"Son grandes apoyos y aliados", dijo. Sin embargo, tanto Nunn como Hagan y otros aspirantes demócratas, intentan convencer al electorado de su distanciamiento y desaprobación de las políticas de Obama en algunos temas clave. "Creo que Obama debería haber aprobado el gasoducto Keystone, creo que debería haber evitado los recortes del secuestro de gasto?" aseguró Nunn durante una entrevista con Politico.