La rentabilidad del bono a 10 años estadounidense, también conocido como Treasury, se coloca en el 5,09%, con lo que por primera vez desde junio de 2002 supera los 500 puntos básicos. Las ventas se están cebando con la renta fija, ante la avalancha de datos macroeconómicos que se conocen en EEUU durante las próximas tres horas. El mercado está pendiente, sobre todo, de los precios de la importación, las ventas al por menor y el índice de confianza de la Universidad de Michigan.